Capitulo 2

6 2 0
                                    

**Clarisse O 'Kelly**

Aún no me creo que hayamos hecho todo eso y que haya salido bien, me parece impresionante y aunque también denigrante, no es que tenga muchas opciones.

No da para nada el dinero que ganamos, no es que con eso se nos acaba el problema, si sé bien que solo se pone peor, ahora necesitamos seguir trabajando y buscando a quien más engañar.

Esto es más agotador que el mismo robo en sí. Digamos que al principio era adrenalina, luego solo me canse de vivir mi vida así y ahora solo digamos que lo hago por deber.

Estamos en un buen momento, y sin duda, eso debo aprovecharlo, pues no pasa muy seguido. Compré una hermosa prenda sexy para esta noche, espero con ansias a que llegue para que podamos disfrutar de nuestro aniversario, el cual quizás él no recuerda, pero no me molesta, casi nunca lo hace.

Preparo la casa y adorno con algunas velas, lo hice lo más económico posible, no era el mejor momento para gastar un solo peso. A pesar de todo, el lugar me quedo muy bonito.

Todo lo que hago para calmar mi mente, y no pensar en nada.

Lo peor de todo es que llega las nueve de la noche y nada, pasa una hora más y sigue en lo mismo, y cuando llegan las once me empiezo a preocupar, no me contesta, y lo que puedo hacer en esta situación es salir a buscarlo a casa de su madre.

No se que más yo necesito para abrir los ojos, parece que usará anteojos para ver una realidad que no es. Más me enfoco en que Aldo malo pudo haber pasado.

Así que con ese pensamiento en mente, me cambio y lo más rápido que puedo ya estoy en su casa, pero no hay nadie, aquí tampoco está. Estoy como desesperada, no sé dónde está y eso me empieza a preocupar, Andrew no es un santo y se pudo meter en un problema.

Una vecina me ve inquieta todavía viendo de un lado a otro y se acerca a mí.

—No están, Margaret se puso mal y Andrew la ha llevado al hospital de emergencia —Me dice como intentando calmarme.

No es que me alegre de esta situación, pero ya saber dónde está, me deja más tranquila porque se que no le ha pasado nada.

—Muchas gracias —Me doy media vuelta y vuelvo a tomar un taxi.

Ya en el taxi lo sigo llamando, pero sigue sin atenderme. Debe estar demasiado estresado con lo de su madre, y en mi mente solo se alberga eso, sin importar nada más.

Nada más llegar me lo encuentro en el pasillo, se nota que está muy preocupado, y cuando me ve llegar corre a abrazarme y en su rostro veo su inmensa tristeza.

Esto es lo que mantiene aquí, solo esto, él es para mi, el mismo apoyo que yo soy para él, nos tenemos el uno al otro.

A veces cuando las cosas van de mal en peor, me pregunto si todo lo de los robos que Andrew está constantemente planeando se deben solo a su madre y hoy podría decir que sí, en efecto es así, pero hay días que no, así que podría decir que es un cincuenta, Andrew no sabe hacer otra cosa y desde que entró en lo de los robos nunca más quiso salirse. Tiene una mente brillante y no la usa como es debido.

—Ella estará bien, siempre logra recuperarse —No sé si se lo digo segura o porque ya esto es normal que pase, desde que se enfermó no hemos tenido un momento de paz. Y no es que la odie, es que simplemente odio la manera en la que lo manipula para que le dé lo que ella quiere.

Que ironía.

—No soportaría perderla Clar —dice contra mi cuello, no ha dejado de estar pegado a mí desde que he llegado, y eso hace ya casi cuarenta y cinco minutos.

INSANITYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora