Capitulo 7

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**Clarisse O'kelly**

Esas han sido las palabras que más me han dolido en lo que llevamos de relación, porque ahí es donde yo estoy, luchando contra el mundo, por él, por mí, y sobre todo por personas que ni me quieren ni me valoran.

—Espera... —Me mira confundido —, no se dé que me hablas, estoy aquí con mi madre desde anoche —Me lo dice muy tranquilo, lo que me hace enojar más.

—No es posible, porque tú fuiste el único que fue a casa anoche —Quiero creer que tengo la razón, porque todas las cosas que me imaginé cuando vi la casa destrozada, toda las maldiciones que le eché, y tantas cosas que le dije en mi mente, además de que todo parecía hecho con saña y rabia, más lo que le dije ahora , empezaría a considerarlo injusto.

—No, cuando me dijiste que no ibas, colgué el teléfono y mi madre se puso mal, salí corriendo de allí y no volví más. Explícame de que hablas —Me vuelvo un mar de lágrimas, no es fácil perder todo lo que tienes, me siento como si un huracán hubiese pasado, pero no por la casa, sino por mi vida propia.

—Han destruido la casa, no hay nada que sirva —Lo digo entre lágrimas, su rostro muestra preocupación y asombro, eso demuestras que no pudo ser él, y me pongo aún peor por haberlo culpado sin razón alguna.

—Y pensaste que lo hice yo —Al parecer eso es lo que más le molesta —. Jamás acabaría con lo poco que tenemos, ni por despecho ni por nada. No puedo creer que hayas pensando eso.

Y aquí vamos, una vez más haciéndome sentir culpable por lo que digo o hago.

Pero no se que decir, no le está prestando atención a que haya pasado eso, solo se está concentrando en que yo lo culpe a él, si se supone que fue el único que estuvo allí... ¿Que más puedo pensar? Es lo más lógico según los sucesos.

En un duelo de miradas incómodos, un doctor se acerca y Andrew me ignora para ir con él, aprovecho para irme yo también. Ya no quiero su opinión o su ayuda, necesito buscar ayuda yo, y por lo visto, él no me la dará, está más que claro quien es la prioridad aquí.

Marco el número de Nadia, tengo que decirle lo que pasó y pedirle que me deje quedar por los menos unos días en su casa.

—¿Ya me extrañas? —Pregunta riendo al contestar el teléfono.

—Destruyeron mi departamento y todas mis cosas —Lo suelto, aún no me calmo, sigo un poco afecta y sin poder hablar claramente.

—¡Joder Clar! ¿No me digas que lo hizo el estupido de Andrew? —Hasta ella piensa lo mismo que yo, y que mal concepto tuvimos ambas.

—No, creo que quizás alguien se metió a robar en la casa, pero no tengo idea de quién pudo ser, si nunca pasó algo así, no mientras yo estaba en la casa —Explico con la voz temblorosa.

—No amiga, pero que bueno es Dios, que esa vez no estabas allí, te pudieron hacer algo. ¿Donde estas? Iré por ti —Pregunta un poco preocupada y agradezco mucho más tenerla en mi vida.

Que bueno que ella propuso eso, porque creo que ya no tengo para más taxis. Le doy la dirección y me quedo a esperarla aquí, un poco lejos del hospital para no toparme con Andrew, no después de lo que acaba de pasar allí dentro.

Lo acabo de culpar de algo que no hizo, y no conforme con eso, también me acabo de dar cuenta que nunca seré la primera, la prioridad o la forma de desahogo. Cada que le pasa algo a su madre no me llama, me entero por los demás, cuando soy yo la que se arriesga más por ella.

Pasan alrededor de unos veinte o treinta minutos; no los cuento, ella llega y se estaciona frente a mi, de inmediato corro y me subo al auto, no quedandome de otra que contarle con lujos y detalles lo sucedido.

INSANITYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora