Una Novia Para Amanda Gray

30. ...

Amanda

Luego de una llamada a mi madre, que terminó en otra segunda llamada a la mamá de Derek, me encontré de nuevo en dirección rodeada de tres madres —contando a la de Jake— disgustadas y con muchas cosas que opinar.

La madre de Derek fue la más relajada en la oficina, todo lo contrario a la mía.

Mi madre tiene esa presencia tan extraña cuando se trata de temas serios, es como una sombra que sin importar donde estés puedes sentir que está detrás tuyo juzgándote con la mirada.

Aunque la señora Anderson lucía menos preocupada de la situación, como si no estuvieran contándole todo lo que ha hecho su hijo. Se quedaba sentada con sus manos entrelazadas sobre las rodillas viéndonos con sus ojos cansados y con ojeras mientras asentía a lo que el director decía.

Luego de unos minutos que me parecieron años de vida en los que mi madre discutía con nuestro director y la madre de Jake , se llegó a la conclusión de que su sofisticada escuela no podía permitir que esto volviese a suceder, e hicieron lo único que saben hacer, desechar las cosas que no sirven.

La mamá de Jake intentó discutir al principio, hasta que se dio cuenta de que no había nada más que hacer y terminó aceptando con un suspiro y un simple "Está bien, entiendo".

Aún a pesar de todo el movimiento a mi al rededor yo no podía alzar la vista de mis manos. Las voces sonaban muy lejanas a mi.

Expulsaron a Jake.

¿Pero por qué no me siento mejor?

—Lamentamos que su hija pasara una mala experiencia —de un momento a otro sólo quedamos mi madre y yo sentadas. El director no suena sincero, pero supongo que es su deber al menos disculparse—. Nos aseguraremos de mantener a raya cualquier incidente de este tipo para...

El celular de mi madre empieza a vibrar en su bolso y ella lo saca y contesta sus mensajes como si la presencia del hombre frente a ella no significara nada.

—Que así sea. No quiero tener que volver a poner un pie en este lugar solo para terminar el trabajo que ustedes no pueden hacer.

Mi madre ni siquiera mira al hombre, solo se queda sentada con las piernas cruzadas y la espalda recta a mi lado como si esto fuera una platica de todos los días. A diferencia del director, que parece no saber si ofenderse o mantener la calma.

—Un gusto conocerla señora Gray, perdone las molestias.

Mi madre le dedica una mirada con desdén al hombre seguida de un asentimiento y me mira para que nos vayamos.

Cuando salimos apenas me da tiempo de mirar a Amelia, que sigue sentada en la misma silla de hace rato, junto a Derek y su mamá.

Él me mira con preocupación esperando que le diga que tal me fue, pero le hago un gesto con la mano para que no intente acercarse y me alejo por el pasillo con mi madre a un lado tecleando en su celular.

Mientras caminamos a la salida no dice nada acerca de lo que acaba de pasar, solo me mira de reojo un par de veces para comentar cosas sobre mi aspecto desarreglado a las que nunca contesto.

—Espero al menos ver buenas calificaciones después de esto —dice cuando ya vamos en su auto de camino a casa.

Mantengo la vista clavada en la ventana.

—Está bien.

Cuando llegamos el único que parece alegrarse es Robert. Dejo caer mi mochila sobre el sillón y me agacho para acariciarlo a pesar de que me dejará lleno de pelos el uniforme.