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El camino de la capital hasta un lugar lejano lleva alrededor de una semana, aunque también depende mucho de la cantidad de personas y maletas que son llevadas. Charlotte lleva casi un carruaje completo lleno de regalos para su papá, todos fueron elegidos por su linda Omega, que no ha dejado de murmurar totalmente preocupada de no caerle bien a su suegro. Qué por cierto es el único omega que ha logrado tener un territorio propio sin ser administrado por un alfa. ¡Hablamos de Lucifer Morningstar, el ex prometido del rey!

— Amor, ¿Y si no le caigo bien? ¿Y si no me acepta?

Charlotte había ido a su encuentro, pues estaban a punto de empezar su viaje rumbo al sur. Allí donde el verano es más caluroso, dónde las flores y los patos no pueden faltar. Ese lugar que la vio crecer, ese mismo lugar que su padre se encargó y esforzó en construir para ella. Ese es su hogar.

La rubia sonrió, agachándose para dejar un beso en los labios de la morena.

— Se que le caerás bien, Vaggie. Papá ama todo lo que yo amo. — sonrió — Y si yo te amo, él te amará.

La chica Omega sonrió enternecida, abrazando a su alfa.

Quizás ser parte de la familia Morningstar no sea tan malo como su madre había dicho anteriormente, ha comprobado que Charlotte es encantadoramente dulce y confiable. No ha visto ningún rastro tóxico o algo parecido en ella, y está segura de que su suegro será igual.

Pero aún hay algo que la deja desconcertada.

— Amor... ¿Alastor sigue viviendo con tu padre?

La rubia se dió la vuelta y asintió, sonriéndole.

— Él cuida a mi padre, aunque tenga inclinaciones hacia el ocultismo no es un mal alfa. — aseguró ella.

Pero Vaggie no estaba del todo segura.

🍎 • • • 🍎

Lucifer había estado ocupado junto con Alastor, leyendo y leyendo los informes que Stolas le había enviado. Recibió muchos llamados de atención por el alfa del norte(que está en el mismo sur pero más al pñnorte), pero aún así fue reacio a obedecer. No puede quedarse quieto ante tremendo escenario, uno de sus residentes murió en su tierra ¿Cómo va a quedarse de brazos cruzados? Por ello, se ha quedado despierto hasta tarde, leyendo a la vez que toma nota de los puntos similares en cada caso que ha leído. ¡Y solo ha encontrado dos similitudes entre los casos iniciales y en los actuales! Y es que todos son omegas, y han sido preñados. No es la gran cosa como para estar feliz, pero aun así lo está. Actualmente está en la habitación de estudio, la que está al fondo del pasillo, la habitación delante de la biblioteca. Ahí es su santuario para trabajar en todo lo que respecta a su territorio, el que tanto le costó conseguir. Se encuentra solo en un incómodo silencio, dónde no hay nadie más que él en esa habitación rodeada de papeles.

Alzó la mirada, buscando una cabellera castaña.

— ¿Alastor? — llamó.

Apenas eran las seis de la tarde, hora en la que ambos ya deberían haber cenado y quizás preparándose para ir a la cama. Pero, algo estaba sucediendo delante de sus narices y recién empieza a darse cuenta. ¿En qué momento Alastor salió de su oficina? ¿Por qué su aroma se siente extraño? Ese comportamiento es extraño, Alastor siempre le dice que saldrá de la habitación o que regresara en un par de minutos. Pero está vez no hizo ruido, como si nunca hubiera estado dentro en primer lugar. Lucifer se puso de pie, yendo a la puerta mientras soltaba un fuerte suspiró.

¿Quizás salió al jardín?

Abrió la puerta y lo recibió un pasillo silencioso, no había ni un sonido en el exterior. Y eso le causó un escalofrío, no había rastro del aroma de Alastor en la habitación, ni en el pasillo. Tampoco había rastros escasos en el aire que lo llevarán a la ubicación del alfa, solo estaba él en la gran mansión que tiene de hogar.

El novio de mi hija. [RadioApple]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora