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𝑫𝒓𝒊𝒇𝒕𝒎𝒂𝒓𝒌 ━━━━
── Al parecer, la marea no fue amable contigo ── se burló Jahaerys de su padre, quien aún seguía pálido después de tanto vomitar.
── Tal parece, hijo mío.
El carruaje se detuvo; habían llegado a Driftmark. Con la ayuda de Jahaerys, Rhaenyra bajó, y al pasar las puertas divisaron a Laenor luchando junto a un rubio. Ambos, al verlos entrar, dejaron de luchar e hicieron una reverencia.
── ¿Dónde está Lord Corlys? ── Preguntó Lord Lyonel ── debería estar aquí para recibir al rey ── nuevamente se quejó la nueva mano del rey.
── Bienvenido a Driftmark, mi rey ── Laena Velaryon saludó, mientras Jahaerys simplemente sonreía al ver a su antigua amiga.
── ¿Qué significa esto, Lady Laena? ── Cuestionó Lord Mano ── ¿Es así como la casa Velaryon recibe a su rey?
── Mi padre acaba de llegar de un largo viaje ── Explicó, acercándose a sus invitados ── está en la Sala de los Nueve esperando a Su Alteza.
── Acabemos de una vez ── Habló Viserys, cansado.
(...)
Los pasillos de Driftmark eran cálidos, a pesar de las constantes olas que chocaban contra la pared, creando un ambiente cómodo que a Jahaerys le resultaba agradable.
Frente al Salón de los Nueve, las grandes puertas fueron abiertas. Viserys, Lyonel y Jahaerys fueron los primeros en pasar. Cuando ambas mujeres se disponían a pasar, las puertas fueron cerradas.
Jahaerys admiró las paredes pintadas con hermosos barcos. Era un pasillo lleno de pinturas. A pesar de haber visitado Driftmark muchas veces, irónicamente nunca había entrado al Salón de los Nueve.
