Alaia.
La semana se pasó volando, estuve planeando todo para Alemanía y practicando con el arco, eso me ayuda a desestresarme.
También recibí mensajes de Keler (nada fuera de lo normal) volvió hacer el mismo tipo y todo por culpa de esa estúpida llamada.Dijo que todavía no encontraba nada sobre el otro hombre de la foto de que hallaron Derek y Mackensi.
Con mis amigas hablo todo los días, Angie ha estado haciendo videollamadas muy seguidos con Carson, ella me cae muy bien y creo que es perfecta para mí amiga. Ya Aldo está en su país duró dos días enviándome notas de voz en modo drama por lo de Gigi, dice que fué un infierno.
Pero al recordarle lo del penthouse se le pasaba.
Mamá sigue con mi abuela.
Cierro la maleta, una porque solo estaremos dos días.
Papá toca la puerta de mi habitación, suspiro.Sus mentiras y secretos aunque no lo noten me desgarran por dentro, desde pequeña el y yo hemos tenido la más hermosa confianza que puede tener en un lazo padre e hija.Todavía recuerdo como si fuera ayer cuando me leyó por primera vez el cuento que qué hizo para mí y que me leía cada vez que me sentía triste.
Me trago el sabor amargo de la presente Realidad.
El viaje en el jet privado fueron horas pero para mí pasó volando ya que me distrae con su anécdotas que siempre me han resultado fascinantes.
Aterrizamos en Berlín y mi padre me ayuda a bajar la escalerilla.
—¿Nerviosa?—pregunta con curiosidad.
Se porque lo dice, ya que diré un discurso en el evento.
Niego confiada.
—Una Allen jamás se pone nerviosa.
Papá sonríe.
Nos subimos a unos de su coches que tiene predilecto en Berlín, como siempre viajamos estamos preparados.
Los otros de atrás son los guardaespaldas de papá he notado que últimamente ha duplicado la seguridad.
Llegando al hotel nos adentramos en él.
Las habitaciones y suites están decoradas en tonos cálidos y cuentan con muebles de diseño. Cada habitación tiene grandes ventanales que ofrecen vistas panorámicas de la ciudad.
Y es así porque la mira me da una grandiosa vista.
Le tomo una foto al cielo que está adornado de rascacielos el cielo está nublado típico del clima gélido de Alemania.
A las seis comienza el evento benéfico y a las 9 es la gala del mismo evento pero claro sin los niños solamente con los donadores.
Me quito la ropa del viaje y la reemplazo con un conjunto color azul eléctrico, que consiste en un top de manga larga y un pantalón suave que se ajusta a mi trasero y mis muslos.Decido dejarme el cabello suelto.
Uso una botas de tacón blancas con cordones del mismo color que el conjunto.
Al evento solo vamos los deportistas, estaremos conviviendo con algunos niños de la fundación durante dos horas, me emociona tanto porque amo enseñarle cosas nuevas a los más pequeños y hablar con ellos.
El lugar está a dos calles del hotel, tenía pensado ponerme mi abrigo y ir caminando hasta ahí pero uno de los guardaespaldas de mí padre me vigiló todo el camino por lo menos tuvo su debida distancia, a cada nada volteaba los ojos,es ridículo como si no me sé cuidar sola.Llego al sitio y los organizadores me reciben gustosos dándome un pequeño y breve tour, después a la gran sala principal En dónde están los demás no hicieron actividad al aire libre porque últimamente ha hecho demasiado frío y es mejor en un lugar cerrado.
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Soy famosa no princesa.
RomancePara Alaia su vida es como siempre lo había soñado desde pequeña, no le pide nada más a la vida porque para ella ya lo tiene todo: una familia amorosa y millonaria, sus mejores amigas que siempre están en los peores y malos momentos, su academia y s...