13.🖤

601 51 18
                                    


Dos años después....



























Nah mentira, es una broma jajajajaajajjaajajaj.

Se asustaron eh.

Ahora sí el capítulo:





Alaia.

No podemos saber.

¿Que no podemos saber?.

Esa es la pregunta que me hago en los diez segundos que pasamos en silencio.

Abro la boca para decir algo pero Keler me da una mirada larga de ni se te ocurra.

Idiota.

Oh bueno vamos al inicio, insultandolo en mi mente que avance.

Todavía siento la respiración del heredero en mi nuca y los estúpidos gusanos en mi estómago no dejan de hacerme cosquillas.

¿Gusanos?.

¿No eran mariposas?.

-Deja de moverte joder- susurra.

Levanto una ceja, nadie me da órdenes.

-No- le digo y me dedico a escuchar mejor pero con el atrás no me concentro.

Resopla.

Los de la sala vuelven a hablar.

-Bueno como todo está aclarado Mi familia y yo regresaremos a California lo más pronto posible - dice mi mamá.

¿Regresar?.

Solo tenemos una semana y unos días aquí y eran más.

-Pero recuerden que tienen que volver, para lo que ustedes ya saben- habla el Papá de Keler.

Díos mío me siento en una película de misterio.

Esto está muy raro pero yo sé que Keler piensa lo mismo y como me ve se le ocurre lo mismo que a mí.

Trabajar juntos.

Trago grueso.

Trabajar en equipo.

Me hace una seña para que lo siga. Sin dudarlo ni quejarme lo sigo.

Lo sigo en silencio por los pasillos del palacio que con su silencio hacen que se me pongan los pelos de puntas.

Camina muy rápido a diferencia de mí.

Después de unos segundos de casi correr llegamos a una puerta mucha más grande que la mía y la habre..

OH POR DIOS.

Es su habitación , su habitación.

Me vuelvo a poner tiesa y el me ve como si fuera rara y me agarra la espalda para entrar, el solo contacto me hace dar un sobresalto y el lo nota porque se aleja.

Cierra la puerta con seguro y siento que me va a dar algo.

Esto no es buena idea; primero porque estar con el chico que te gusta en su habitación es tentativo y segundo siendo yo virgen y la ganas de explorar lo desconocido se hacen presentes.

-¿Que hacemos acá?- pregunto con un hilo de voz.

Me aclaro la garganta.

Por dios Alaia eres una Allen compórtate.

Me recuerdo a mi misma.

-Para hablar - responde y me invita que me siente en unas de las sillas que están al lado de la cama.

Soy famosa no princesa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora