Nuevamente, este capítulo será corto.
Aron y Meowscarada me trajeron al hospital de este pueblo... sin embargo, mi cuerpo está débil, el doctor me dijo que tengo fiebre, y que está algo alta. Quiero seguir viajando, pero debo estar en reposo. Demonios... de verdad quiero seguir... quiero... dormir...
Punto de vista de Aron.
¿En qué momento te enfermaste, Mike? Recuerdo cuando eramos niños, nos conocimos en la escuela... tenías de las mejores calificaciones, eras de los mejores, yo te admiraba...
Cuando comenzamos a crecer, interactuabamos menos... pero eso no nos hacía dejar de ser amigos. Cuando nos reencontramos, me sentí muy feliz de volver a verte. Ah, sí... cómo olvidar las veces que peleamos... siempre era yo el ganador.
Cuando era niño, mi padre me enseñó artes marciales, lo básico, no soy un experto, pero al menos puedo defenderme de manera apropiada.
De pequeños, tú siempre fuiste... inmaduro, por así decirlo, recuerdo que por que tenías las mejores calificaciones, te creías demasiado.
Siempre eras arrogante, llegabas a ser irritante. Pero ahora mírate... has cambiado demasiado... la gente se alejaba de tí por tu actitud, pero ahora... eres "maduro".
Me recordabas a Naruto... la diferencia era que tú si sacabas buenas calificaciones, je, je...
No puedo evitar recordar muchos momentos que pasamos juntos. Me da lástima ver que estás mal, quiero ayudarte, pero a la vez quiero dejar que te recuperes por tí solo...
Cambiando de tema, quiero ser un gran entrenador pokémon, quiero luchar en gimnasios pokémon. Al menos no ser el mejor, pero al menos uno de los mejores. No me interesa tener varios pokémons en mi pokédex, solo quiero lo justo y lo necesario para ser de los mejores.
Recordemos cómo eramos de niños...
Años atrás, tú y yo eramos, y somos buenos amigos, ese día fué la primera "lucha" por así decirlo, entre nosotros.
- ¡Aron!
- ¿Eh? ¿Qué pasa, Mike?
- ¡Luchemos!
- ¿Qué? ¿Para qué?
- ¡Quiero demostrarte que soy más fuerte que tú!
Me sorprendí un poco, sin embargo, no podía esperar mucho de él, siempre tan creído... le aceptaré el "reto".
- Bien, bien...
Me puse en guardia, y esperé el ataque de Mike.
- ¡Toma esto!
Mike intentó darme un golpe, pero solo bloqueé, y le dí un empujón que lo hizo retroceder. Es débil... decidí provocarlo con palabras.
- ¿Eso es todo? Qué patético...
Su rostro cambió ligeramente. Al parecer, mi provocación está haciéndolo enfadar.
- ¿Patético? ¡Preparate para mi segundo golpe!
- Inténtalo...
Mike corrió hacia mí, y me intentó acertar golpes continuos. Como era de esperarse, ninguno tuvo éxito alguno.
Una vez terminó de dar esos "golpes" continuos, decidí darle un golpe yo. Iba con algo de fuerza. Le dí en el abdomen.
- ¡Ah...!
Mike se retorció un poco, creo que me excedí un poco de fuerza...
Finalmente, Mike cayó al suelo de rodillas, quedando derrotado ante mí.
- Eres débil, Mike.
- Y-yo... a-algún día... seré mejor... incluso m-mejor que t-tú...
- No te engañes a tí mismo, Mike. Admítelo, siempre seré mejor que tú...
Volviendo al presente, he visto que él es mejor que antes, no estoy seguro si me ha superado, pero lo dudo. Eso sí, su actitud es más seria, menos confiada, más conciente... eres una mejor persona, amigo.
Punto de vista de Mike.
Cuándo abrí los ojos, ví a Meowscarada sentada en una silla al lado de mi camilla. Ella estaba durmiendo, casi roncando. Me siento un poco mejor, sin embargo, aún siento mi cuerpo debilitado.
Debido a esto, opté por dormir un poco más...
...
Una vez desperté nuevamente, ví la hora en un reloj cercano, y ví que ya era mediodía. No había nadie en la habitación, solo el doctor, y yo.
- Buenas tardes, Mike. ¿Cómo te sientes?
- M-me siento un poco mejor, gracias.
- Es bueno oír eso.
El doctor tenía unos papeles, junto con unas pastillas en la mano. Supongo que me va a dar de alta.
- Bien, Mike. Te daré estos medicamentos, al cabo de aproximadamente uno, o dos días estarás mejor, no es nada grave. Te daremos de alta.
- Muchas gracias.
Me pasó los papeles y las pastillas, mientras yo me levantaba de la camilla para seguir mi viaje.
Tomé mis cosas, me puse mi bufanda, mi cinturón, me puse la mochila, y me despedí del doctor amablemente.
Ví a Meowscarada y a Aron en la sala de espera, sentados. Me pregunto, ¿que será de Jolteon? No la he visto. Meowscarada al verme, se levantó rápidamente y me dió un fuerte abrazo.
- ¡Mike, qué bien que estés bien...!
- N-no grites...
- Meow...
Miré a Aron, y decidí preguntar.
- Oye, Aron, ¿dónde está Jolteon?
- Está en su pokéball, no ha salido de ahí...
- Ah, okey...
Ya estabamos listos para partir y seguir nuestro camino. Aunque mi cuerpo esté algo débil, y aún tengo algo de fiebre, no me importa, quiero, y necesito seguir el viaje.
Los medicamentos que me dió el doctor son solo pastillas, así que supongo que si las consumo tal y como me lo recomendaron, me recuperaré con rápidez. Creo.
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Una historia irreal. {MUERTA, MÁS NO CANCELADA}
FanfictionMike, un chico de 15 años un tanto común, tiene una Floragato. Ambos, son muy unidos. Una noche, algo cambia... {ESTA HISTORIA TIENE ESCENAS +18, SE RECOMIENDA DISCRESIÓN}