Capitulo 15: Celos.

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Hace frío esta mañana... Pero no importa, con tal de que Meowscarada, Jolteon y Aron podamos seguir nuestro camino, estaremos bien. Esta mañana como dije antes, es fría, no era de esperarse el calor, ya que estamos en un motel en la montaña a las afueras de Kanto. Las montañas, siempre quise escalar una... La verdad, me gusta mucho explorar zonas como las montañas o bosques, son muy reconfortantes de cierto modo. Me levanté en la mañana, y ví como Meowscarada seguía dormida... Me dió ternura verla dormir, pero tenía que despertarla y seguir nuestro viaje.

- Meowscarada... Despierta...

Esas palabras no fueron suficientes para despertarla, se notaba que estaba en un sueño profundo. ¿Acaso... Tendré que despertarla de otra manera? Tal vez...

- Meowscarada... Meowscarada...

Ella no despertaba, seguía acurrucada en la cama, con los ojos cerrados... Me daba un poco de pena despertarla, pero dicho anteriormente, tenemos que seguir nuestro camino. Así que como Meowscarada no despertaba, decidí despertarla de una manera un tanto... Peculiar.

- Si no te levantas ahora... Te tendré que dar una nalgada...

Sí, dije eso en voz alta... Fué un poco vergonzoso, pero era lo que tenía en mente... Así que... Tomé el valor suficiente, y le dí una nalgada un poco fuerte a Meowscarada. Ella abrió los ojos, sorprendida, pero soltó un gemido con una mezcla de sorpresa y algo de placer.

- A-ah...~

Ella me miró, y una sonrisa se dibujó en su rostro. No pude evitar sentir un rubor en mis mejillas. Mientras Meowscarada me dirigió la palabra una vez más.

- Mike, eres travieso... Pero me gustó eso. Buenos días.

- Buenos días...

- Despiértame más seguido así, ¿si?

- Con gusto...

Meowscarada se levantó de la cama, mientras yo la miraba con ansias de seguir nuestro viaje. Ella se acercó a mi, y me dió un beso en los labios. Me sentí muy feliz, ya que tenía muchas ganas de un beso suyo... Después, alejé un poco mi rostro del beso, y sonreí.

Era algo temprano en la mañana, así que hacía frío. Además de que obviamente seguiamos en la montaña a las afueras de Kanto, el frío es fuerte, pero el frío no me va a impedir seguir nuestro camino...

- Oye, ¿vamos a por Aron, y sigamos nuestro camino?

- Claro, estoy ansiosa por seguir nuestro camino...

- Entones, ¡en marcha!

Me cambié mi pijama, y me puse una camisa azul, un chaleco naranja, un pantalón naranja también, y unos zapatos azules.

Meowscarada me miró, y sus ojos brillaron. Supongo que fué porque le recordé a algo. No pude resistirlo, le pregunté a qué se debía ese brillo en sus ojos.

- Tus ojos brillan... ¿A qué se debe eso?

- Tu ropa me recuerda a... Cómo se llamaba...

Meowscarada se puso a pensar. Supongo que intentando recordar a qué le recuerdo. Estoy ansioso por su respuesta. ¿Será positivo? ¿Negativo? Ella respondió:

- Cómo se llamaba ese tipo... Era de un anime que estabas viendo...

- ¿Recuerdas el nombre? 

- No lo recuerdo muy bien... Pero, en una escena, él tenía un aura roja... Y decía "Kaio-ken".

Una historia irreal. {MUERTA, MÁS NO CANCELADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora