Capítulo 35

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Los platos iban quedando vacíos. Uno por uno acababan en manos de los camareros que, una vez comenzó a hacerse tarde, se los llevaban para no traer más. La mesa de los más ruidosos quedó cubierta por vasos rebosantes y botellas de alcohol.

—Tenéis que decirme si hay coreógrafos freelance en la academia.

El vaso de Seungmin nunca estaba vacío pero tampoco lleno, como si una fuerza siempre lo mantuviese en su justa medida. Esa fuerza se llamaba Jeongin.

—¿Y tú para qué lo necesitas?

Chan tenía una lista en su cabeza que recordaba a duras penas tras la duda. Quizá había bebido un poco de más.

—Es que el manager ha dicho que necesitamos un baile viral, mercadotecnia, dice. No me preguntes, yo solo hago musiquita.

Levantó los hombros con desdén mientras el resto le miraba con las cejas levantadas. ¿Acababan de descubrir que el misterioso Seungmin se convertía en un libro abierto cuando estaba borracho?

—Oye, ¿pero se puede saber por qué eres tan así?

Jeongin se quejó, amenazando con violencia física, junto a un Hyunjin que le agarró con rapidez y apoyó su queja asintiendo con la cabeza. Sin lugar a dudas, Seungmin con alcohol en sangre era todavía más impasible que estando sobrio. Y Jeongin aún más impulsivo.

Dio otro trago y el músico respondió con un guiño.

—Yo estoy feliz con mi vida bien tranquila, ya sabéis que no me van vuestras dinámicas de chismes, dramas y tragedias.

—Tranquila, mis huevos. ¿Cómo que manager? ¿Baile viral? ¿Mercado... qué? —El más joven sonaba molesto de verdad.

Chan miró de reojo a Seungmin sin hacer mucho caso a Jeongin, que seguía con un sorprendente mal humor desde que volvió del baño. Solo una mirada bastó para que el músico asintiera en respuesta. En efecto, se trataba de la chica del teléfono, pero Chan necesitaba detalles.

—Espera, pero... ¿Cómo? ¿Qué? —Changbin se quedó en silencio, procesando.— ¿Pero tú dónde trabajas?

—Solo estoy como asesor en la JYPE.

—"Solo", dice.

Chan bebía mientras miraba a todos por encima de la lata de cerveza.

A veces, estando con ellos, sentía la diferencia de edad. Era un poco triste cuando se daba cuenta de lo diferentes que eran sus vidas. Quizá por eso disfrutaba el tiempo con Minho. Sus rutinas eran más parecidas. Pagar alquiler y facturas, el trabajo, los horarios, las reuniones... Y, de pronto, se encontraba con que Changbin trabajaba en una tienda de música, que Seungmin estaba en la JYPE, que la familia de Jeongin tenía una tienda en la que ayudaba... No solo podía sentirse cómodo con Minho.

Escondió la sonrisa detrás de la lata.

—¿Y cómo acabaste ahí? —Preguntó con genuina curiosidad, tenía algunos amigos dentro de la empresa y siempre se quejaban de lo difícil que fue entrar.

—Estaba en la fase de investigación para un trabajo de clase y entre una cosa y otra... Me tendré que poner a mi mismo en la bibliografía.

—Pequeño ego tiene el amigo —Jeongin seguía curiosamente molesto.

—Solo ayudo a Dahyun a producir el álbum, supongo que cuando acabemos me echarán.

—"Solo", dice —repitió Changbin.

—Dahyun, eh... —Felix se apoyó en la mesa y sonrió con picardía.— Verás, Chan, que al final te roban al muchacho.

—Primero de todo, no soy gay.

My pace - MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora