Para el caballo de guerra está el alfil y para el alfil el peón; esto si prefieres utilizarlos como medios de contención; pero si prefieres atacar con ellos, debes protegerles.
Las torres ociosas tienen un solo destino, en el mismo pueden morir protegiendo al rey o pueden morir en el conford de su cargo; mientras que las diligentes tienen dos destinos. Se sacrifican en batalla por el reino o viven contribuyendo a las victorias del mismo.
En el ajedrez debemos estar claros en esto: No hay enemigos pequeños.
El juego puede cambiar en cualquier momento, tanto a favor como en contra; piensa rápido, pero piensa bien; no menosprecies el valor de un peón, es el único que puede convertirse en una segunda reina.
No se puede jaquear mientras eres jaquead@; resuelve primero tus asuntos internos, antes de irte a conquistar otros reinos o metas.
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Mi herencia
Historia CortaMi herencia, es un conjunto de análisis critico de la vida cotidiana y diversos temas, donde expreso mi criterio y algunos consejos; que estoy seguro: ¡TE AYUDARAN A BIEN!