Cap 4

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Entre de un portazo a el colegio y todo me miraron sorprendidos incluyendo mis hermanos. Yo no andaba de ánimos para explicar mi actitud.

—¿Y eso?— Me pregunta mi hermano mientras se aleja dos pasos de mi.

—Ay que miedo...— Murmura mi hermana, mientras a diferencia de mi hermano, ella se acerca.

—¿Que pasa?¿Que me miran?— Digo mientras camino a mi clase.

—Hoy despertaste de mal humor— Me dice Max mientras mira a su alrededor y yo lo acerco hacía mí.

—Estoy bien, solo no ando de ánimos para nada— Digo mientras miro mal a los Alfas que estaban viendo a mi hermano.

—Casi siempre tienes ánimos para todo, veo que... hoy si fue la excepción— Dice Natsu mientras se pone a mi izquierda, cubriendo a Max.

—No digan esas cosas... estoy completamente sano— Les digo a ambos, pero no me creen por mi cara de culo.

—Tienes cara de culo— Dice Max mirándome la cara.

—Es su cara normal— Dice Natsu viendo su cuaderno de tareas.

—¿De verdad es su cara real?— Preguntó Max, que parecía confundido al escuchar a Nat.

—Sí, solo que tú nunca la viste porqué siempre es buenito contigo— Dijo Natsu, ahora ella con cara de culo.

—¡Ya, dije que estoy bien!— Aprieto los puños mientras entrecierro los ojos.

—Si que lo estás...— Dijo Natsu mientras hacía una mueca con su boca.

—Creo que me voy a acostumbrar a esto...— Escucho decir a Max mientras mira a la nada.

Genial... estoy de malas un miércoles a las 6:00am, y no es porqué toca clases de matemática, si no porqué éste mismo día, intentaré ver quien es el que me sigue.

Se que me dije a mi mismo que iba a ignorarlo y simplemente correría a mi clase cada vez que estoy solo, pero la intriga de saber quien es, me estuvo matando a la noche.

No pierdo nada con intentarlo, bueno, aparte del susto que me voy a llevar, eso lo aseguró.

Me separó de mis hermanos y no escuchó nada de lo que me dicen cuando me ven ir hacía otro lado que no sea la dirección de mi clase.

Me escondo en la habitación de limpieza y espero unos minutos hasta que todos se vayan.

Cuándo ya no escuchó pisadas o charlas, salgo de la habitación de limpieza y camino por los silencioso pasillos

Sí eso quería... siento otra vez miradas en mi espalda, pero ahora tengo un plan para poder saber quien es el que me mira y liberarme de esto.

Me doy la vuelta y no veo nada como siempre, si quiero ver quien es la persona que me sigue, tengo que fingir que estoy asustado o no tengo la intención de ver quien es.

Camino hacía un lado aleatorio y vuelvo a sentir miradas en mi espalda, aunque tenga un plan sobre siendo abrumador sentirlas detrás mío, es espeluznante.

Vuelvo a mirar detrás mío y mis ojos se van de aquí para allá buscando a aquella persona, al no ver a nadie sigo caminando.

Supongo que esto está funcionando, creo que si no estuviera actuando, sea quien sea hubiera salido corriendo antes de que vuelva a girar atrás.

Miro detrás mío una última vez, en eso, me doy la vuelta y corro en dirección contraria por donde iba y escuchó pisadas alejarse de mí, lo sabía... alguien me estaba siguiendo, no era mi imaginación.

Esa cosa es muy rápida, sus fuertes pisadas se alejan cada vez más y tengo que forzarme a correr más rápido de lo normal.

Comienzo a correr por los pasillos, y cuándo cruzo por uno de ellos, ya no escuchó nada ni veo nada, que rabia me da.

Golpeó uno de los casilleros y me alejo del lugar, solo que está vez ya no siento miradas detrás mío, debió irse lejos para que no lo atrape, bueno con esa velocidad seguro se fue casi al otro lado de la escuela.

Espero y eso sirva como una advertencia de que no soy una presa sencilla para atormentar.

Si descubro quien es esa persona que no para de seguirme como un acosador de quinta, lo voy a descuartizar.

Miro a los lados y camino directo a mi clase, no estaba tan lejos del lugar, pero tengo que irme pronto antes de que me encuentre con un maestro o peor con el director.

La verdad a los maestros no les importa mucho que lleguemos tarde a la clases, pero no toleran que estemos afuera, ni yo los entiendo, pero así son.

Entro a mi clase de un golpe y el profesor me mira sorprendido, y con una ceja levantada.

Me siento rápido en mi silla y me pongo a copiar la tarea antes de que me pregunten la razón de mi rabia.

Por suerte el profesor lo ignoro por completo, yo ya tenia unas excusas en mi cabeza para poder terminar rápidamente la conversación con él y estar en paz.

Pero eso ahora es lo de menos, no logré atrapar a la persona que me seguía y miraba mi espalda, es frustante... muy frustante.

Pero no me quedaré de brazos cruzados y dejare que me siga tomando como una presa, voy a ver quien es, cueste lo que cueste.

Pero esto solo será un secreto mío, no se lo diré a ninguno de mis hermanos aunque eso me de ventajas por la velocidad de Nat, pero soy terco y quiero hacerlo por mi mismo.

Esto parece una cacería, como si yo fuera un cazador intentando atrapar a un leopardo o a un oso pardo, no lo sé.

Ahora si me pondré las pilas, y veremos quien va a ganar ahora en este pequeño juego de cacería...

💙

Malas manipulacionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora