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Seungmin escuchaba con atención lo que su amigo le decía mientras acariciaba sus castañas hebras con cariño en modos de consuelo, llevaban así más de 20 minutos.

-Perdí mi virginidad con un imbécil, Minnie.- sollozó con fuerza y entonces Kim lo atrajo a un abrazo.

-La virginidad técnicamente no existe, pero la primera vez de todos suele ser un un idiota, o una mala experiencia. Si eso te hace sentir mejor.- pronunció y Jisung negó con su cabeza mientras se aferraba al torso de su amigo.

-Quiero abrazarlo...- susurró tan bajo que ni siquiera él mismo se escuchó, pero pareció olvidar el buen oído que poseía su mejor amigo.

-Sunggie. Sé que te duele, y no te voy a reprochar eso que acabas de decir, pero si te pones en ese plan la vas a pasar peor, créeme. Lo sé por experiencia propia.- besó los cabellos castaños mientras con cariño recibía el frágil cuerpo del más bajo.

-Él parecía diferente.- dijo y Seungmin asintió estando de acuerdo.

-Aunque si lo piensas más, no hay que lucir de una forma en específica para ser un hijo de puta.- refleccionó y Jisung sollozó con aún más fuerza.

-Él luce tan bien, no puedo creer que me acosté con él. Soy un idiota.- dijo levantándose del sofá y yendo a la cocina, con un curioso Kim Seungmin siguiéndole el paso. Tomó una botella de la nevera y tomó de ella, se sentía deshidratado después de tanto llorar, ... y todo lo que faltaba aún.

Puchereó ante sus propios pensamientos.

-Ahg, ¿Por qué los alfas tienen que ser tan estúpidos? Me voy a casar con un omega.- dijo frunciendo el ceño y Seungmin se señaló a sí mismo con ambas de sus manos, robándole una risa al castañito.

-Disponible. Omega hermoso y con un increíble sentido del humor. Soy un partidazo, lo sé.- se autoelogio y entonces Han sonrió más. Agradeció el tener a alguien con quién compartir sus penas, que lo comprendiera de aquella forma tan maravillosa y no lo juzgara.

 Agradeció el tener a alguien con quién compartir sus penas, que lo comprendiera de aquella forma tan maravillosa y no lo juzgara

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El jueves había llegado y un animado Minho se levantaba de su cama dispuesto a ir con la menor de sus energías a la escuela. Miró su celular y puchereó al darse cuenta de que Jisung no la había respondido aún.

Se dio una rápida ducha y bajó a la cocina para desayunar en compañía de sus padres.

Una vez hubo terminado se encaminó a su institución, sonriendo enorme al ver a su grupo de amigos, los saluda cada uno de ellos y mantenía una amena conversación con ellos hasta que a lo lejos vio a Jisung.

Se despidió de ellos y se dirigió a Han, quien parecía estar escoltado por su mejor amigo.

-Sunggie, cielo.- llamó acercándose para darle un beso en la mejilla al nombrado, pero este se las ingenió para que nunca llegara, esquivándolo como mejor dio lugar. -¿Amor?- cuestionó confundido la actitud del otro. Sin embargo, él lo sé inmutó

Chocolate [MinSung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora