CAPÍTULO 12

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Los llamados se oían desesperados, mire con extrañeza a mi acompañante, quien estaba en modo alerta, observé como caminó con desconfianza hasta perderse de mi vista, camine directamente hacia los llamados, y por el rabillo del ojo visualice a Rose y Samantha asomándose por la puerta del estudio.

Abrí la puerta con un poco de temor, no entendía quien estaba tocando con tal desesperó. Era Nate, su figura demostraba nervios y temor, en cuando me vió su semblante cambio a uno aliviado, yo lo observé confundida y un poco molesta por haber interrumpido mi casi beso con Brahms.

—¡Jodie!, no tienes ni idea de lo mucho que corrí hasta aquí.— su voz salió en jadeos, ahora entendía porque estaba desaliñado y sudoroso.

— ¿Qué? — Él me observó con curiosidad, y luego soltó sin filtros.

— Me preocupé cuando no me respondiste más en la llamada, pero me preocupe aún más cuando oí la voz de un hombre llamándote.

Maldición.

Había olvidado ese detalle, cuando me paralice y solo pensé en Samantha. Nate había escuchado la voz de Brahms.

Lo primero que se me ocurrió fue soltar un:

—¿Eh?

El me observó con confusión, y luego su mirada se volvió desconfiada.

— ¿Estás sola?— Soltó dejándome aún más confundida por su repentino comportamiento, ahora la que lo miraba con cierta desconfianza era yo.

— No, mi hermana y Rose están aquí

— Me gustaría verlas— lo miré acentuando mi desconfianza por sus palabras, sentí como alguien caminaba en mi dirección por mi espalda, la duda de si era Brahms me generó pánico, el cual fue reemplazado con alivio luego de observar a Rose a mi lado.

—¿Puedo ayudarte joven?— su voz denotaba un poco de enojo, pero su rostro mostraba confusión por él nuevo personaje frente a nosotras.

— ¿Es usted Rose, supongo?— hizo una pausa para estrechar su mano con una Rose que asintió a su pregunta —. Mi nombre es Nate, escuché que la policía venía en esta dirección y quise ver qué todo estaba en orden.

La mueca de Rose al oír aquello fue de total desagrado y desconfianza, soltó su agarre, todos estábamos en una especie de pelea en ver quien desconfiaba más de quién.

— Un placer Nate, pero aún no has dicho que relación tienes con mi nieta como para venir a buscarla con tanto afán — tenía una ceja alzada, la miré en cuanto dijo la palabra nieta.

— Lo lamento, soy amigo de Jodie.

— ¿Y le pretendes?

— Si ella me lo permite.

Mi cara iba de lado a lado, parecía un partido de tenis y yo ya me estaba artando de ser su fuente principal de charla. Los mire a ambos con el ceño fruncido.

— Pero bueno, ¿Se dan cuenta que estoy aquí mismo?

— Silencio Jodie, quiero saber si este joven realmente es de buenas intenciones para contigo.

La miré con incredulidad e indignación, ¡Es increíble!.

Ella observó la anatomía de Nate, ¡Incluso lo rodeó! Solo para al final asentir, e invitarlo a pasar, cosa que estaba ¡Estrictamente prohibida!

Una curiosa Samantha estaba parada al final de la escalera, y le hecho una mirada de desconfianza a Nate, ella ya lo había conocido en aquel café y según ella no le daba confianza para nada.

«TEACH ME»| Brahms Hellshire.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora