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Zayn se abrió paso entre la gente que bailaba sobre la pista de baile. El club al que había obligado a ir a el rizado estaba lleno y la música retumbaba en todo el lugar. Harry permanecía con el ceño fruncido, aún reusandose a intentar continuar.

"Vamos hazz, alégrate. Te presentaré a los omegas que harán que quites de tu cabeza esa ridícula fijación con tu secretario" rebatió sin importarle el gruñido amenazante la nzado por su amigo.

Una vez ya ubicados en la zona vip, el moreno lleno de bebidas la mesa, llamando a varios omegas para distraerse. Pero todos esos intentos fueron en vano, el rizado no acotaba palabra alguna, aún cuando uno de los omegas se subió a su regazo, ofreciéndole un baile sensual.

Pero su vista se encontraba perdida recorriendo el lugar y mirando a todos divertirse. ¿De verdad eso era la felicidad? ¿Porque sentía que nada de eso era ahora correcto como antes le parecía?

Sus divagaciones terminaron al mirar a las personas que ingresaban en el club. Harry boqueó sin dar crédito a lo que estaba viendo.

Louis.

El mismo que se escondía detrás de su escritorio, entre hojas y tras las enormes gafas que tapaban sus ojos azules, sonreía mientras caminaba, abrazado a el brazo del alfa rubio con quién se pasaba la mayor parte del tiempo.

El traje azul con brillos que portaba se ajustaba a su curvilínea figura, dejando en claro la cintura que poseía así como sus caderas y muslos rellenos. Era un maldito dios escapado del mismísimo olimpo, y él un simple mortal que continuaba con su mandíbula desencajada.

La sonrisa que no abandonaba su rostro era genuina, marcando las líneas a los costados de sus bellos ojos azules que no hacian mas que resplandecer.

No se había dado cuenta, pero se había robado la mitada de todos los alfas de el lugar, algo que por alguna razón lo hacían sentir molesto, demasiado para su gusto.

"¿Ya viste quien está ahí?" Zayn lo codeó sin ocultar su asombro. "Maldita sea, ¿Esa impresionante figura es suya? Debo decir que lo tenia muy escondido el desgraciado" el ojimiel se mofó del castaño.

Harry gruño molesto en su dirección, aclarando su garganta al instante, intentando evitar seguirlo viendo, bebiendo de su bebida con desinterés.

"Tengo mejores omegas que ver antes de perder el tiempo con mi asistente" su mandibula apretada no decia lo mismo. El moreno lo observó con detenimiento.

"¿Tu...?" Inquirió señalandolo y luego a el castaño.

"Yo, tengo una larga noche para disfrutar con Will, no tengo que especificar que estaremos haciendo" hablo de manera sujestiva, terminando su vaso de coñac.

Del otro lado de la pista de baile y frente a otra barra que se encontraba en el lugar, Louis permanecía nervioso, pegado a el brazo de su amigo.

"Tienes que relajarte, Boo. Tomemos algo mientras esperamos a Liam"

"Está bien, pero no te apartes de mi"

"No te preocupes, yo te cuido" respondió tomándolo por la cintura y dejando un beso sobre sus cabellos castaños. Luego tomó su mano y tomaron asiento frente a la barra, pidiendo dos cervezas mientras esperaban.

"¡Que comience la fiesta! Grito efusivo Liam al llegar donde estaban los amigos, recibiendo los Vítores de la gente que los rodeaba.



...
Pasadas las dos de la mañana, Louis sonreía ebrio mientras bebida más del vaso que le ofrecía Liam, abrazado a el alfa, quien se encontraba igual que él.

Mi Secretario PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora