Desmadre

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No había manejado tan rápido su motocicleta desde hacía rato. Supo que era momento de bajar la velocidad cuando sintió a su acompañante apretar mas su cintura. De acuerdo, tal vez se le fue un poco la mano pero se sentía emocionado, por un lado estaban sus sentimientos, lo que ella representa para el y por el otro a lo que habían decidido avanzar.

A los pocos minutos llegan al edificio dónde se ubica el departamento al que decidieron mudarse todos juntos excepto Smoke, una vez en el estacionamiento con cuidado ayuda a la chica a bajarse, ella no tiene por costumbre viajar en motocicleta y esto se refleja en la extrema precaución con la que deja el vehículo.

-Lo siento, debí ir mas lento.

Se disculpa con verdadera intención cuando su novia estuvo completamente abajo.

-No te preocupes, estoy segura que con el tiempo me acostumbraré.- Le da un corto beso en los labios

-Aun así, para la próxima iré mas despacio al menos mientras tomas confianza. -esta vez es él quien toma la iniciativa de besarla.

-¿Vamos? .—ella asiente levemente.

La toma de la mano y salen del estacionamiento para entrar al edificio. Ella se notó algo nerviosa al ingresar al elevador, se siente igual que si hubiera estado en una montaña rusa y todo su interior estuviera fuera de su lugar, una presión en el pecho, mil ideas cruzando su mente, incluso cree sentir que tiembla ligeramente.

-¿Estas bien? -pregunta al notarla tensa una vez que salen del ascensor. -Creeme que...

-Lo estoy. -interrumpe sonriéndole sin ocultar su nerviosismo, sabe que no tiene que fingir nada con él.

-¿Estas segura? -Cuestiona nuevamente cuando se detiene frente a la puerta del departamento.

-Lo estoy -repite apretando la mano de su novio como señal de sentirse segura con él.

-Tu mano, está fría.- comenta dandole un pequeño beso al dorso de la misma.

-La tuya también. -sonríe

Después de un corto silencio donde sus miradas expresaron la confianza que había entre ellos, él le pide que sostenga su casco mientras toma sus llaves del bolsillo de la chamarra y abre la puerta con cuidado. Le hace una señal para que se mantenga en silencio y tras verificar que todas las luces están apagadas le indica que puede entrar, acción que ella realiza despacio, el se ocupa de cerrar la puerta y voltea preocupado cuando la siente pegada a su costado, al girar nota que ella tiene la mirada en el sofá. El sigue su vista y se fija en dicho lugar, se sintió totalmente estúpido. Se inclina y se acerca al oido de la chica para susurrarle y que solo ella escuche.

-Lo siento. -se disculpa y al instante se le eriza la piel a la chica por sentir el aliento de su novio sobre su oído. —Smoke pasará la noche aquí, lo olvidé, que pendejo. —hace una pausa, viéndola fijamente.—¿Te quieres ir? —ella no responde— Entiendo.

Se dispone a abrir la puerta nuevamente pero antes de que se de la vuelta ella solo niega efusivamente con la cabeza. Él cree que es por evitar romper el silencio pero en realidad ella se quedó paralizada. Entonces el chico toma ambos cascos para colocarlos con sumo cuidado en un mueble que tienen en la entrada.

Tomandola de la mano, camina de forma rapida pero con todo el cuidado del mundo evitando hacer ruido.
Rodean la sala, y entran al pasillo que los lleva a la recamara del guitarrista.
Pasando junto al pasillo que lleva al cuarto de Daniel y frente a la puerta de los otros dos habitantes de la casa.

Abre despacio la puerta y esta emite un leve rechinido que normalmente no es perceptible pero siendo de madrugada la maldijo molesto.
Entraron rápidamente y la cerró tras de sí poniendo el seguro. Al instante ambos dejaron de contener la respiración.

Wiplash & The jingle bellsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora