Sangre real, destinos entrelazados

Capitulo 13: Malo mintiendo

Jonathan esperaba con nerviosismo en el tranquilo jardín del castillo, envuelto en la penumbra de la noche. Cada minuto que pasaba le parecía una eternidad mientras aguardaba la llegada de Lex Luthor, el influyente noble con el que esperaba encontrarse en secreto. Finalmente, entre las sombras de los árboles, apareció una figura distinguida, avanzando con paso decidido hacia él.

Lex Luthor se detuvo frente a Jonathan con una expresión de curiosidad y cautela en su rostro.

-Príncipe Jonathan, ¿qué asuntos tan urgentes te han llevado a llamarme a estas horas de la noche?

Jonathan se enderezó, manteniendo la compostura a pesar de la tensión que sentía en el aire.

-Señor Luthor, gracias por venir. He buscado su consejo y su perspicacia en un asunto delicado que afecta a nuestro reino -dijo con seriedad-. Sé que usted tiene una estrecha relación con mi padre, especialmente en lo que respecta a los tratos con otros reinos. Me gustaría saber más al respecto.

Lex arqueó una ceja, evaluando las palabras del príncipe con atención. -Comprendo tu interés, príncipe Jonathan, pero no puedo traicionar la confianza que mi rey ha depositado en mí. Mis lealtades yacen con él, y no puedo revelar información confidencial sobre sus negociaciones diplomáticas.

Jonathan asintió, aunque sabía que esta respuesta no le satisfacía por completo. Decidido a obtener la información que necesitaba, sacó una bolsa llena de monedas de oro y la colocó sobre la mesa, desplegando su contenido ante los ojos de Lex.

-Señor Luthor, entiendo su lealtad al rey, pero espero que también comprenda la importancia de los intereses de nuestro reino. Esta suma de oro es solo un gesto de mi gratitud por su tiempo y su disposición a considerar mi petición. 

Lex miró la bolsa de oro con una expresión indecisa, pero finalmente asintió y aceptó el gesto de Jonathan. -Aprecio tu generosidad, príncipe Jonathan. Aunque mi lealtad al rey es innegable, estoy dispuesto a escuchar tus preocupaciones y ver si puedo ofrecerte algún consejo que sea de ayuda para ti y para nuestro reino, siempre y cuando, pueda recibir el doble.

Jonathan frunció el ceño ante la sugerencia de Lex, sorprendido por su audacia. Sin embargo, comprendió que Lex no estaba dispuesto a comprometer su posición sin obtener algo a cambio.

-El doble es una suma considerable, señor Luthor -respondió Jonathan con cautela-. Pero si eso es lo que se necesita para garantizar su colaboración, así será.

Con un suspiro resignado, sacó otra bolsa de monedas de oro, duplicando la oferta inicial y colocándola junto a la primera sobre la mesa. Lex asintió satisfecho y aceptó la nueva bolsa con una sonrisa.

-Agradezco tu comprensión, príncipe Jonathan. Ahora, cuéntame, ¿qué es lo que le preocupa tanto como para recurrir a mí en busca de ayuda?

Jonathan observó a Lex con una mirada penetrante, sus ojos reflejando una determinación firme mientras planteaba su pregunta.

-Entiendo que mi padre y usted tienen una relación cercana cuando se trata de asuntos diplomáticos, especialmente en lo que respecta al reino de Gotham. Después de la traición que sufrimos, me preocupa saber qué planea hacer mi padre con respecto al pueblo de Gotham. ¿Cuáles son sus intenciones al respecto?

Lex se tomó un momento para considerar la pregunta, sus labios curvándose en una sonrisa astuta antes de responder. -El rey Clark es un hombre sabio y pragmático. No dudo de que tomará medidas adecuadas para asegurar la estabilidad y la seguridad de nuestro reino. Sin embargo, sus planes específicos pueden variar según las circunstancias. Es un tema delicado y puede que no esté al tanto de todos los detalles.