Ríndete

Stay in

A.R.★

Me desperté relajado y descansado, la claridad del día entraba por la ventana, pero era extraño, yo no tengo cortinas blancas en mi cuarto... estaba tan a gusto en la cama que me importaba muy poco, supuse que estaba en casa de... espera... era muy raro que se me hiciese de día... en casa de mi entretenimiento de la noche... qué día es hoy?

Me senté en la cama, estaba desnudo, obsevé la cama y estaba vacía... las sábanas eran muy frescas y suaves... con cierto brillo serían de seda? no... eran más pesadas, no como mis camisas.

Miré a mi alrededor y a pesar de mi desorientado estado diría que me resultaba familiar, no ví mi ropa, en realidad todo estaba limpio y ordenado... estaba en un hotel? no... ellos no limpian hasta que sales del cuarto... necesitaba más pistas.

Tenía que ir al baño y como no había nadie a la vista dejé la cama, desde luego ya había estado aquí antes.... después de tirar de la cadena y más aliviado me acerqué al lavamanos, lo habían limpiado hoy, todo estaba muy ordenado, me llamó la atención una nota bajo un cepillo de dientes.

Usa lo que necesites, puse a lavar tu ropa. Bruno

Bruno...cierto! fuí a casa de Bruno después del trabajo... me metí en la ducha y poco a poco comencé a recordar lo que había hecho el día anterior, pronto me asaltaron las imágenes de lo que había pasado en casa de Bruno y con Bruno, salí disparado de la ducha cogiendo la toalla a mi paso y poniéndola alrededor de mi cintura sin tomarme la molestia de secarme, fuí a buscar a mi secretario.

Bruno estaba de espaldas, entretenido limpiando la ventana de su sala de estar, con sus cascos puestos y meneando el trasero al ritmo de lo que fuese que estaba escuchando, todo mi apuro por comprobar que no había sido un sueño se me pasó... no había nada de femenino en Bruno... tal vez... su pelo.

Me acerqué a él y toqué su hombro y casi salta por la ventana del susto - soy yo... tranquilo-

- ¡que susto me diste! y usa ropa quieres?- dijo apartando la vista y retorciendo el trapo que tenía en las manos.

- anoche tú y yo.... no fué un sueño verdad?

-no, no fué un sueño... pero si lo prefieres podemos fingir que lo fué

Aparté el cabello de su cuello y como imaginaba ahí estaban mis mordiscos y chupetones
- dudo que puedas ignorar las marcas que te hice... además pregunté porque me desperté algo desorientado y me vino todo a la mente en la ducha... ¿te duele?-

-no, está sensible pero nada más... cuando me ví en el espejo esta mañana solté un grito... pero no te despertaste, me puse a limpiar como de costumbre y te dejé descansando-

- bien, tengo hambre-

- ya sabes dónde está la cocina, toma lo que quieras, aún es temprano para hacer la comida, te quieres quedar?

- hasta cuando puedo abusar de tu amabilidad?

Se puso a reír pero no me contestó y siguió con lo suyo, me ignoró por completo. Volví al cuarto y me puse unos pantalones de deporte de algodón como los que suelo llevar en casa, fuí a la cocina y puse un par de sandwiches de queso en la tostadora y zumo de una jarra en la nevera, era natural... qué rico.

- te molesta si desayuno en el sofá?- Bruno se quitó los cascos y negó con la cabeza mientras quitaba el polvo y dejaba todo ordenado a su paso; cuando llegué con mi desayuno me puso la tele y me entregó el mando, me concentré en buscar algo entretenido, por suerte Bruno tiene canales de pago y encontré un partido de baloncesto interesante.