Valkiria

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X.D.⚄

Hace seis meses que Bianca no se diga a venir, semana tras semana me las paso reportando la vida y milagros de Adam por su obsesión de recuperarle. Aunque nunca tenga éxito, todos estos años lleva liberando todas sus frustraciones en mi cama.

Si quisiera podría tener todo lo que desea y mucho más, la cuestión es cuánto tiempo más pienso soportar sus desplantes. No soy de su exclusividad porque no puedo tomar en serio sus niñerías.

Aunque jamás la ayudé en sus estúpidos planes... Siempre he dejado una puerta abierta para ella, primer amor.

Quizás las cosas comiencen a asentarse en su sitio, aún sin intenciones de colaborar con sus ideas y apoyando al único amigo que jamás va a traicionarme.

Tumbado en esta cama desconocida pero cómoda, deslizo mi fotografía más preciada de mi billetera para recrearme en la imagen. Con catorce años nos hicimos la instantánea, justo unos días antes de entrar al instituto y Adam siempre un poco más alto que yo, parece otro, es la única fotografía en la que no lleva cara de poker.

Las cosas se van a poner color de hormiga a partir de ahora, una confirmación mía de que Adam parece haber encontrado a alguien y ella aparece por arte de magia.

Pero sus ideas no han mejorado con los años, supongo que es lo normal, su adicción a la cocaína no ayuda a pensar con claridad. Quizás mantiene el vicio porque es la única forma de que Adam muestre algún tipo de sentimiento hacia su persona. Con lo sencillo que es quedarse quieto y esperar a que el hombre te tome en cuenta, si permaneces el tiempo suficiente para que deje de considerarte parte del decorado que le rodea.

Bruno es de esas almas que no pasan desapercibidas ni intentando desaparecer entre la multitud. Había escuchado su voz antes, su profesionalidad al otro lado de la línea no proyectaba lo que en verdad es.

Ciertamente conocerle es algo interesante, Adam me lo había descrito cientos de veces, pero sus palabras no tenían ningún sentido para mí. Una mirada y de pronto todas aquellas elucubraciones de mi amigo tomaron forma. No puedo juzgar su aspecto pues después de su paso por el hospital, pero no parece una chica y si lo fuese bueno... Mi imaginación no es muy buena en ese aspecto.

Lo que podía ver es lo imposible que resulta no quedarse mirándole, sus ojos verdes, su personalidad y su forma de moverse es perturbadora. Es como si estuviera hecho de trozos de múltiples personalidades diferentes.

Durante la noche, no podía contener lo adorable que se comporta con Adam, sobre todo de forma inconsciente. El mero hecho de su presencia, adornaba el ambiente y tenía ganas de darle un abrazo, como a una mascota o algo así.

Bianca no perdió oportunidad de marcar su territorio, con comentarios hirientes y claros intentos de restregarse contra Adam. Es ridículo y molesto porque cuando él pierde la paciencia, ella viene a lamentarse conmigo.

O lo que más me duele... Tiene sexo conmigo mientras imagina que soy Adam, diciendo su nombre como si eso fuera a transformarme. Siempre pensé que mi fascinación con ella se difuminaría con el tiempo. Para dejar paso a una relación verdadera, pero obviamente no controlo mis sentimientos y a pesar de no sentir amor, mi ser se conforma con lo que hay. Hay cientos de mujeres y todavía no encuentro a una que me libere de mi estado.

Me desperté al escuchar movimiento en la casa, Bruno había limpiado nuestra existencia de su apartamento con una quietud pasmosa.

- Buen día

- Buenos días, tienes hambre?

- No gracias Bruno, no suelo desayunar

- Tonterías... Ven conmigo - dijo tomándome de la mano y sentándome en un taburete. Me sirvió zumo, me preguntó cómo me gusta el café y puso la freidora en marcha.

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