Five

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Roseanne's POV.

Mientras me bañaba no dejé de pensar en por qué había decidido quedarme con Lisa en lugar de cumplir con mi deber. Tal vez fue porque no pude mostrarme indiferente a la manera en que se vino abajo luego de haber sido tomada por sorpresa fuera del club o por la manera en que susurró que no quería estar sola. Estaba segura que ella no esperaba que la hubiese escuchado, pero lo hice. Y no lo pude ignorar. 

Mientras me vestía me convencí de que hice lo que un humano decente haría. Mi trabajo consistía en resguardar la seguridad y el bienestar de Lisa. Supongo que resguardar su bienestar emocional entraba dentro de las funciones que debía cumplir ¿No? 

Me puse un par limpio de pantalones negros y una camiseta del mismo color. No tenía una camisa de recambio asique tendría que servir. Metí la ropa sucia dentro del bolso y finalmente salí del baño. No había tardado demasiado y por lo mismo me sorprendió el aroma de comida china ¿Ya habían entregado su pedido? Sí que tenía ventajas ser la hija del Presidente. 

Cuando me dirigí a la sala de estar noté que Lisa había preparado todo para que comiéramos sentadas en el suelo. Había dispuesto algunos cojines sobre este y la comida estaba perfectamente lista en la mesa de centro. 

—¿Cómo lograste tener todo listo en tan poco tiempo?—cuestioné. 

—Tengo mis trucos—respondió con una sonrisa. Fue bueno verla más relajada que antes y me felicité mentalmente por haber tomado una buena decisión—Ven. Pensé que sería más cómodo comer aquí que en el comedor— 

Comer sentada en el suelo de su lujosa sala de estar me daba igual. Había comido en condiciones mucho peores. Tomé asiento en el lugar dispuesto para mí y observé con algo de sorpresa toda la comida sobre la mesa. 

—¿Se unirán más personas?—pregunté. 

—¿Uh?—ella pareció confundida por mi pregunta pero luego siguió mi mirada y notó que me refería a la gran cantidad de comida que había pedido—Oh... sí, tal vez me excedí un poco— 

Sonreí y negué con la cabeza mientras tomaba unos palillos para comenzar a comer. 

—Oh... asique sonríes—

Esta vez fue mi turno de mirarla con confusión. 

—No te había visto sonreír antes. Te sienta bien... deberías hacerlo más a menudo—comentó mientras tomaba un dim sum y se lo metía a la boca—Mmm... delicioso— 

Decidí pasar por alto su comentario sobre mi sonrisa y comencé a comer algunas de las delicias sobre la mesa ¿Realmente pensó que no podía sonreír? Eso era absurdo. Era cierto que mis sonrisas eran menos frecuentes que antes pero por supuesto que podía hacerlo. 

—¿Qué cosas haces en tu tiempo libre?—preguntó. Había puesto un programa de tatuajes en la televisión y pensé que tal vez querría verlo pero al parecer me había equivocado. 

—No tengo mucho tiempo libre—respondí. 

—Pero no estás aquí todo el tiempo—insistió ella—Hoy te fuiste porque tuviste que atender asuntos más importantes ¿No lo recuerdas?— 

Parecía realmente decidida a no dejarlo ir. 

—¿Era importante?—pregunté y ella arrugó el entrecejo. 

—¿El qué?— 

—Lo que querías hablar conmigo cuando salí a atender ese asunto importante—expliqué. 

Ella frunció los labios y se encogió de hombros mientras jugaba con su comida. 

—Sólo quería informarte de los planes en los próximos días... para que pudieras estar preparada con el equipo y todo eso— 

Opposites Always Attract (Chaelisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora