Sara Perché Ti Amo

Capitulo 4

Disclaimer: Los personajes de Station 19 no me pertenecen, son de Shondaland. Solo la historia y los personajes que no reconozcan son míos. 

NOTA: Negritas en italiano. 

—¡NO PUEDO CREERLO! ¿EN QUÉ ESTABAS PENSANDO?

Carina se movía de un lado al otro, incapaz de comprender que era lo que había pasado. ¿Cómo habían ignorado que tenían una niña pequeña viviendo en la estación?

—¡Alessia es mi amiga! ¡No deberían hacerle nada! ¡Ella necesitaba un lugar para vivir y nuestra estación es la mejor casa de todas!

—¡BASTA, FRANCESCA!—reprendió Carina, obviamente su hija no comprendia las consecuencias de sus actos—¡SABES QUE LO QUE HICISTE ESTÁ MAL! ¡ESTE NO ES UN LUGAR PARA NIÑOS!

Cuando Carina subió el tono de voz, Alessia se sobresaltó y soltó un sollozo aterrado, aferrándose con más fuerza a Francesca. Esto sirvió para que todos guardaran silencio,

—Lo siento, Francesca—le dijo a su amiga, tratando de enfocarse solo en ella.

Maya, Carina y el resto del equipo las observaban sin entender loq ue estaba pasando. La estación estaba en completo silencio, se podía escuchar cada una de las respiraciones alrededor de las niñas.

—No es tu culpa—murmuró la menor, intentando consolarla.

Francesca solamente acaricaba el cabello enrededado de su amiga, apretando sus finos labios en un vano intento de parecer tan seria como sus madres pero no lo conseguía. Vic decidió intervenir en ese momento, pues veía el pánico cubrir por completo a la niña desconocida.

—¿Has comido algo hoy?—preguntó la bombero.

Alessia negó con la cabeza, cerrando las ojos al sentir el ardor en la herida que tenía en el pie. Ahora mismo pensaba que esconderse en una estación de bomberos era lo menos peligroso que le había pasado, pero sus heridas decían lo contrario.

—Seguramente no dejaron nada en el refrigerador—se quejó Francesca—¡El equipo B siempre se terminá todo y Alessia no pudo tomar lo que necesitaba!

—Francesca, ¡Silencio!—dijo Carina, intentando controlar su enojo.

—Así que ella es la que se ha estado robando la comida—dijo Travis.

—No...no...¡no soy ladrona!—Alessia temblaba de pies a cabeza, decidida a terminar con aquello.

No pensó dos veces antes de bajar de la mesa en la que Carina la había colocado, aterrizando de una terrible manera y gritando de dolor.

—Voy a traer un botiquín de primeros auxlios y nos encargaremos de esto, pequeña, ¿de acuerdo?

Alessia intentó volver a ponerse de pie, pero esta vez Jack la tomó en brazos y la sacó del comedor, siguiendo a Ben. Francesca iba a dar un paso hacia su amiga, pero las manos de Maya en sus hombros se lo impidieron.

—Tenemos que hablar seriamente, señorita—dijo al Capitana.

—Nosotros nos haremos cargo de la otra niña abajo—comentó Travis—-Si viene alguien pensará que solamente ha entrado y nosotros la atendimos.

—¡Buena idea, Trav!—saltó Vic—Veré si consigo que me diga algo de su familia.

—No la tiene—apuntó Francesca, pero la mirada de Carina la hizo bajar la vista.

Sin embargo, Vic se acercó a la niña y se hincó para estar a su altura, viéndola a los ojos.

—Para que podamos ayudar a tu amiga, tienes que contarnos absolutamente todo lo que sabes de ella, ¿cómo se conocieron? ¿Sabes sus apellidos? ¿Cuántos años tiene?