El ruido de un teléfono sonando me despertó al día siguiente. Con la vista aún borrosa busqué de dónde provenía aquel sonido y me percate de que había dormido con la chaqueta de Lee Chan puesta.
Tomé el celular y me di cuenta de que no era el mío, pero noté que quien llamaba era yo, al parecer.
“Tao Tao” era el apodo con el que me tenía agregada el muchacho. Contesté con dificultad debido al sueño y con una voz bastante ronca hablé.
—Veo que te llevaste mi teléfono—dije poniéndome de pie para salir de la habitación notando como Seokmin se había dormido en el suelo del lugar.
—¿Estás en casa de Seokmin?—preguntó; sin embargo, no sonaba tan dormido como yo, que respondí afirmativamente—. En cinco minutos estaré ahí, dijo con seriedad.
No respondí y corté rápidamente la llamada, a paso rápido volví a la habitación y busqué entre los cajones el que estaba destinado a la ropa que durante el año olvidaba en casa mi mejor amigo y me cambié rápidamente por algo más cómodo.
No tuve tiempo de nada más cuando ya el muchacho había tocado el timbre.
Abrí la puerta para encontrarme con Lee Chan, que tenía una sonrisa juguetona en el rostro.
—¡Buenos días, Liu Tao! ¿Cómo dormiste con mi chaqueta?—preguntó, aun con una expresión divertida en el rostro.
—No es asunto tuyo—respondí, sintiendo cómo la incomodidad se apoderaba de mí. No quería admitir que había usado su chaqueta toda la noche.
—Tranquila, no te preocupes. Alentaste por mi ayer, así que es lo menos que puedo hacer por ti—dijo, extendiendo su mano para entregarme mi teléfono y yo le ofrecí el suyo.
Tomé el teléfono, sintiendo un alivio al tener el mío de vuelta en mis manos. Pero la sensación de incomodidad seguía ahí, como una nube oscura que amenazaba con arruinar mi día.
—Gracias por traerme mi teléfono—dije, tratando de mantener la conversación en un tono neutral.
Lee Chan sonrió ampliamente y asintió.—De nada, Liu Tao. No hay problema—respondió con amabilidad.
Sin embargo, mientras intercambiábamos los teléfonos, sentí un impulso de decir algo más. Quería agradecerle sinceramente por su gesto, pero algo en mí se resistía a hacerlo.
—¿Y bien? ¿Vas a agradecerme por algo más o puedo retirarme?—cuestionó Lee Chan, rompiendo el silencio incómodo.
—No necesitas mi agradecimiento— le dije, con más dureza de la que pretendía—. No hiciste nada que yo no pudiera haber hecho por mí misma.
La expresión en el rostro de Lee Chan cambió, su sonrisa se desvaneció y sus ojos se entristecieron por un momento. Pude ver cómo mi comentario lo afectaba, pero en lugar de retroceder, se enderezó y me miró directamente a los ojos.
—Lo siento si te ofendí, Liu Tao. No fue mi intención—dijo, su tono de voz mostraba un atisbo de arrepentimiento.
Era la primera vez que respondía de tal forma a uno de mis ataques. La primera vez que me disculpaba. Había querido oír eso durante tanto tiempo que no podía creer lo irreal de la situación.
—No importa—respondí, apartando la mirada. No quería admitir que sus palabras me habían afectado.
Hubo un breve momento de silencio tenso entre nosotros antes de que Lee Chan se aclarara la garganta y cambiara de tema.
—Bueno, supongo que debería irme. Tengo cosas que hacer—dijo, dando un paso hacia atrás.
Asentí con la cabeza, sintiendo un nudo en la garganta.
Antes de que pudiera detenerlo, Lee Chan se giró y comenzó a alejarse. Pero en lugar de dejarlo ir, una oleada de frustración me invadió y las palabras salieron de mi boca antes de que pudiera detenerlas.
—Espera—llamé, deteniéndolo en seco. —Lo siento, Lee Chan. No debería haber sido tan grosera contigo.
Lee Chan se detuvo y se giró para mirarme, sus ojos mostraban sorpresa y algo más, algo que no pude identificar.
—No importa, Liu Tao—dijo, con una sonrisa triste en los labios—. Nos vemos después.
Y con eso, se alejó, dejándome con un sentimiento de pesar que no había sentido anteriormente.
—Wow—fue lo primero que dijo mi amigo mientras salía totalmente despeinado de la habitación—realmente necesito que me digas que pasó entre ustedes.
Me senté en el sofá y este se sentó a mi lado.
—¿Por qué odias tanto a Lee Chan?
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