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Como habia dicho Kisume, luego de hablar con Naruto fue al departamento de Sasuke. En el camino había comprado unos cuantos tomates para no llegar con las manos vacías.
Con cada paso que avanzaba se preguntaba como podría hacer para que su amigo Uzumaki no estuviera tan triste, sin embargo no se le ocurría nada para calmar su inquietud.
Desde pequeños había sido bastante fácil hacer que Naruto se recuperara de sus fracasos, pero ese día ni siquiera había querido hablarle ¿y como hacerlo? Estaba avergonzado de no haber pasado el examen, incluso se sentía peor sabiendo que esa no era su primera vez intentándolo.
Se sintió mal al pensar que ella podría continuar con su camino ninja y Naruto se quedaria estancado. Realmente estaba considerando tomarse un año más hasta que Naruto aprobara.
Pero eso sería excederse ¿no? Ella también tenía sus metas, y aunque él rubio Uzumaki era importante para ella, no debia frenarse solo por ello ¿o si?.
Mientras pensaba en una respuesta a su pregunta interna, casualmente miro al cielo notando las blancas y pequeñas nubes que destacaban del fondo celeste.
Había escuchado por ahí hablar a Shikamaru de lo mucho que desaba ser una de ellas, quizá como un pensamiento para el mismo. A kisume le hacia gracia los tipos de pensamientos del Nara, era alguien vago pero ella había notado su gran intelecto, incluso mayor al de ella, por mucho.
Su vista pasaba de nube en nube encontrando diversas formas en ellas, sin embargo dos personas encima de un techo llamaron su atención, desvío su mirada directamente hacia ellos, eran Naruto y Mizuki sensei. Poso su mirada particular mente en Mizuki, quien era el que hablaba mientras que el rostro de Naruto se alegraba más con cada palabra que salía.
"Extraño"
Kisume continuó caminando mientras su mirada seguía en el peliceleste. No sabía por qué, pero le daba mala espina tenerlo ahí charlando cómodamente con su amigo rubio.
La Raikun sintió un escalofrío recorrer su espalda cuando repentinamente su sensei poso su mirada en ella de reojo y sonrío de forma sutil.
— Dios, que susto —susurro la azabache para si misma desviando la mirada y continuando su trayecto.
Naruto sabía lo que hacía, y Mizuki es su sensei ¿que podría pasar?
""""
Una corta caminata después, ya estaba frente a la puerta de su amigo azabache. Golpeó la puerta tres veces y cuando Sasuke abrió pudo sentir un sutil aroma a tostadas quemadas salir de la cocina.
— ¿Otra vez cocinando, Sasu? —El azabache iba a desviar la mirada perk no pudo apartarla cuando sus ojos se quedaron fijos en la bolsa que Kisume llevaba.— Traje tomate, una pequeña demostración de amor y un soborno para que me ayudes con una cosa...
