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Choji y Kisume siguieron en contacto, convirtiéndose inevitablemente en mejores amigos que compartían la mayor parte del tiempo cosas en común.
Para los padres de ninguno paso desapercibido que sus hijos tenían una nueva amistad así que luego de unos días los hijos de cada uno se habían juntado en sus respectivas casas. Choji en la de Kisume y viceversa.
La amistad no solo fue con los niños, tanto la familia Raikun como la familia Akimichi se había hecho cercana.
Choza Akimichi y Rei Raikun, padres de ambos niños, se habían hecho particularmente amigos cercanos, ya que además ambos compartían algunas misiones juntos.
Ahora mismo, choji estaba de visita en la casa de la pelinegra comiendo unas frituras en su cama mientas la contraria estaba ansiosa.
— ¿Como es que tu no te preocupas? —hablaba dando vueltas por la habitación.
Mañana empezaban la academia.
— No tengo por qué preocuparme, es algo normal Kisu.
— ¿desde cuando eres tan maduro?
— desde que se me acabaron las papas —dijo lloriqueando y la pelinegra se acercó a un mueble de la habitación sacando de ahí una de las tantas bolsas de frituras que tenía.
— Toma, la próxima me traes unas —dijo dándole el paquete cosa que hizo a Choji sonreír achinando sus ojos.
Tierno, pensó Kisume mirando con una sonrisa a su amigo, hasta ahora el único que tenía.
— Graciss Kisu —agradeció comenzando a comer nuevamente.
— Ahora si ¿como se supone que vaya mañana? —volvió a desesperarse la pelinegra haciendo reír a su amigo.
— conozco a algunos de nuestros compañeros, Kisu, no te preocupes son buenas personas. —pero eso no hizo que la chica se calmara y le quito la bolsa de papas a su amigo comenzando a comer ella.
Choji soltó un suspiro e hizo mala cara a su contraria.
— ¿para que me das la comida si me la vas a quitar? No hagas eso — la chica soltó una leve risa y le dio la bolsa nuevamente.
— Perdón Cho ¿Quieres ir a dar un paseo? Te acompaño a casa.
Choji asintió y ambos salieron a caminar hasta el clan Akimichi conversando un poco sobre comida.
Muchos pensarían que kisume sería una despreocupada por su físico, pero lo cierto es que aunque coma bastante, su cuerpo sigue en buen estado, resultado al arduo entrenamiento que lleva con su padre.
