Me encontraba subiendo rápidamente dentro de la caja, con la intensa luz roja en el techo.
—No otra vez—susurré para mí, me sentía confundida y desorientada.
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Un largo pasillo apareció el cual se fue oscureciendo.
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—Thomas—vi a una chica castaña que se encontraba en diagonal a mí, estábamos rodeados de pantallas, y utilizabamos unas especies de batas blancas.
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—C.R.U.E.L es bueno—otra mujer vestida de blanco y con cabellos rubio caminaba dentro de la habitación viendo los monitores—No se los facilites—las luces se prendían y se apagaban.
¿C.R.U.E.L? ¿Facilitar? no entendía nada de lo que estaba hablando esa señora.
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—___ todo va a cambiar—la misma castaña que llamaba a Thomas me estaba mirando, pero yo me encontraba acostada en algo.
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Vi como varios chicos se encontraban dentro de unas especies de cápsulas llenas de agua, uno se puso a golpear el vidrio queriendo salir.
—¿Qué es esto?—pregunté mientras que todas las imágenes pasaban muy rápido.
—C.R.U.E.L. es bueno—su voz era muy parecida a la de Thomas
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Ahora estaba acostada en una fría camilla de metal, unos hombres con trajes de doctores y mascarillas estaban a mi alrededor, pude ver en una mesilla con utensilios médicos de acero.
—No se acerquen—murmuré con voz adormilada, me sentía sin fuerzas.
—Esto va a doler—escuché decir a uno de ellos.
—No me toquen—cada vez mi visión se iba poniendo más borrosa y al girar mi rostro pude ver a Thomas en una camilla a mi lado y un poco más allá a la chica castaña.
—C.R.U.E.L es bueno—era la voz de la señora rubia.
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La cara de los médicos mirándome y el rostro de la muchacha castaña aparecieron, de repente me encontraba dentro de la caja otra vez, sentí la desesperación apoderarse de mí, sentí que chocaría contra el techo.
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De un sobresalto me desperté, vi a mi lado como el castaño respiraba de forma errática y se movía, por lo que me levanté rápidamente y fuí a despertarlo.
—Thomas—le susurré ya que los demás aún se encontraban durmiendo—Despierta—le toqué suavemente el brazo y vi como abría los ojos asustado—Solo fue un sueño, tranquilo—le dije mientras acomodaba su cabello.
—Lo siento—se apresuró a decir—¿Te desperté?—mientras observaba a los demás.
—No—le respondí—Me desperté hace un momento por un sueño—vi como el castaño miraba detrás de mí, por lo que giré mi cabeza para saber que se encontraba viendo.
Las puertas del laberinto se estaban abriendo y allí se encontraban Minho, Newt y Alby, hablaron por un pequeño instante hasta que el asiatico y el moreno emprendieron su marcha al interior del laberinto, dejando a Newt en la entrada que los vió alejarse.
—Eso es extraño—dije mientras veía al rubio a lo lejos.
—Lo mismo pienso—me respondió mi amigo que aún se encontraba semi acostado en la hamaca.
Los demás comenzaban a despertar, entre ellos el pequeño de rizos, el cual dió un gran bostezo mientras se estiraba.
—Buenos días, Chuck—le dije mientras le daba una sonrisa.
—Buenos días chicos—se frotó los ojos pegando otro bostezo.
Con Thomas soltamos una ligera risa ante la tierna escena que nos entregó el menor.
—¿Cómo se encuentran tus heridas hoy ___?—me preguntó el castaño mayor mientras examinaba mi cuello y muñecas con la mirada.
—Me duelen un poco las costillas—le respondí pude notar la mirada de preocupación de ambos chicos—Así que ahora iré a ver a los docs para que me revisen—intenté tranquilizarlos lo que pareció funcionar.
Me puse zapatos mientras se iban levantando.
—¿Necesitas que te acompañe?—me consultó Thomas.
—Tranquilo, iré sola—le dije—Los alcanzo en un rato más—les di una sonrisa y me fui a ver a los docs.
Caminé por el claro a paso lento, aproveché de ordenar un poco mi cabeza, esos sueños me dejaban intranquila, no parecían nada bueno y eso me asustaba un poco ¿qué era eso de C.R.U.E.L? Además esa mujer rubia no me agradaba para nada, también estaba lo de Thomas ¿era o no mi hermano? si de algo estaba segura era que si nos conocíamos antes de estar aquí metidos, me perdí tanto en esos pensamientos que no me di cuenta que había llegado hasta que choqué con un alguien.
—Lo siento—me apresuré a decir.
—Tranquila—me dijo Jeff—¿Te duelen ?—me preguntó mientras veía mis moretones.
—Siento como si me hubiera caído un árbol encima—toqué despacio sobre mis costillas.—Clint me dijo que viniera si tenía dolor—di un ligero suspiro de resignación.
—Entremos, Clint debe estar dentro, te revisaremos—soltó una ligera risa y abrió la puerta dejándome pasar y efectivamente el chico castaño se encontraba dentro arreglando algunas cosas.
—Hola—dijimos el moreno y yo a la vez.
—Hola chicos—se dió vuelta el castaño para mirarnos.
—Siéntate ___—Me dijo Jeff.
Me senté, mientras veía a los chicos sacar algunas cosas.
—¿Cómo va el dolor?— me preguntó Clint.
—Creo que puedo estar peor—solté como broma, los chicos soltarón una pequeña risa—Lo que más me duele son las costillas—comenté mientras me tocaba la zona—Entre la pelea amistosa con Gally y lo de ayer, mi cuerpo no se recuperó del todo—suspiré.
—Podemos vendar la zona de las costillas—dijo Clint mientras me cambiaba el vendaje de las muñecas.
—¿El cuello no te duele?—me preguntó Jeff quien sacaba las vendas de mi cuello.
—No mucho—le respondí.
—Los moretones se ven bastante mal—murmuró—Pero si no tienes dolor, está bien, no es necesario vendar la zona, y las heridas de tu labio y ceja están cicatrizadas—finalizó mientras iba a dejar algunas cosas en una mesa.
—¿Puedes levantar un poco tu polera ___ para vendar tus costilla?—preguntó Clint mientras Jeff le entregaba el vendaje.
—Si—subí un poco mi polera, y Clint pasó las vendas alrededor de mi caja torácica
—Listo ___—dijo el castaño y yo baje mi polera—ya sabes, si tienes dolor ven—finalizó el chico mientras ordenaba algunas cosas.
—Gracias, chicos—les agradecí mientras me iba en busca de Thomas y el pequeño Chuck.
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Entrelazados ♡(Minho y tú)
AdventureEn un mundo postapocalíptico devastado por una misteriosa enfermedad nombrada la llamarada, la protagonista, una joven valiente y decidida llamada ___, despierta en un lugar desconocido. No recuerda su pasado ni cómo llegó allí. Pronto descubre que...