Capítulo 13: Interés

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Nos pusimos a correr hasta salir del bosque, y nos encontramos con Chuck quien se estaba riendo de algo.

—Chuck ¿qué ocurre?—preguntó Thomas apenas llegamos.

—Es increíble—dijo el pequeño mientras apuntaba hacia algo, con los demás volteamos a ver qué era lo que sucedía.

La chica nueva, se encontraba subida en lo más alto del mirador al que nos subió Alby cuando llegamos, y ella se encontraba tirando cosas los chicos que se encontraban abajo, quienes se intentaban proteger.

—Cuidado con mi cabeza—escuché decir a Sartén.

—Vaya— solté con una ligera risa.

—¡¡Ey, ey, ey!!— gritó Gally—¡¡Si lanzas otra roca voy a...!!—el rubio no terminó de hablar, ya que una roca le cayó justo en la frente, solté con carcajada ante esto—¡¡Ay!!—lo escuché quejarse, cuando me giré para ver a Thomas él ya no se encontraba a mi lado.

—Venimos en son de paz—gritó Sartén.

—Lo que hubiera dado por golpear con esa roca a Gally—dije divertida.

—Vaya ___ no pensé que eras de las que les gustaba golpear a los demás—dijo Minho a mi lado.

—A los demás no—volteé a verlo—A Gally—me dio una sonrisa.

—Pareciera que le das mucha atención a Gally—se puso delante de mí—¿Qué debo hacer para tener más atención que él o el resto?—sentí como iba acercando su rostro, sentía como mis mejillas se calentaban.

—¡¡Oye, oye, soy Thomas!!—escuché los gritos de mi amigo castaño—¡¡Soy Thomas!!—aquello nos distrajo de la conversación ya que la chica dejó de tirar cosas—¡¡Ahora voy a subir ¿Okey?!!—le gritó a la chica.

Nos acercamos con los demás mientras Thomas subía por aquel mirador.

—¿Él estará bien?—pregunté al aire.

—Si aún no lo tira desde arriba, si—me respondió Minho que estaba a mi lado, volteé a verlo y lo empujé un poco, pero ni lo moví, él soltó una risa cantarina que se me hizo melodiosa, no muchas veces había escuchado al pelinegro reír.

—Deberías hacerlo más seguido—murmuré.

—¿Qué cosa, ___?—dios, lo hermoso que sonaba mi nombre en sus labios.

—Reír—solté sin pensarlo.

—Lo haré siempre y cuando tenga un motivo para hacerlo—me respondió con una sonrisa de lado.

—¿Cuál podría ser uno de esos motivos?—lo miré fijamente mientras mordía un poco mi labio inferior, estaba nerviosa.

—¡¡¿Qué pasa allá arriba?!!—escuché el grito de Gally cerca, lo que hizo que pegara un respingon del susto, alce mi mirada y Thomas se asomó.

—¡¡¿Va a bajar?!!—preguntó Newt.

—Ahm—sonaba indeciso el castaño— Oigan denos un segundo ¿si?—habló Thomas.

—Quizás deberíamos dejarlos hablar—les dije a los demás—Puede que ella esté asustada, no nos conoce—miré a Newt buscando aprobación.

—Okey—dijo mi amigo rubio—Vámonos—ordenó y empezó a caminar para irse.

—¿Todas están así de locas?—cuestionó Sartén con diversión.

—Ella sólo está asustada—dije suspirando cansada, ellos no estaban entendiendo lo que la castaña sentía, despertar en un lugar desconocido y sin tus recuerdos era terrible, pero en un lugar con todo lo anterior y rodeada sólo de hombre era aterrador, si bien los muchachos no le quieren hacer daño ella no podía saber eso.

Intercambié miradas con Chuck y Minho, y volvimos a mirar hacia arriba hacia donde estaban los dos chicos hablando.

—Bueno, no creo que bajen luego—hablé derrepente.

—Eso es cierto—asintió Chuck—Iré a hacer mis cosas—partió caminado el pequeño.

—Vamos a la choza,___—me ordenó Minho—Quiero que memorices partes del laberinto—comenzamos a caminar—Para que puedas a empezar a manejarte sola en allí dentro—sus pisadas eran firmes y se notaba en como sonaban dentro del bosque.

—¿Para qué no me pierda?—solté divertida—¿Acaso estás preocupado por mí?—dije en forma juguetona.

—Sé que eres curiosa,___— pude ver la choza cerca—Si llegas a perdernos de vista quiero estar seguro de que sabrás volver—quedé algo atontada ante sus palabras, abrió la puerta para dejarme pasar.

—Entonces si te agrado algo—no sabía muy bien que responderle, estaba algo nerviosa.

—No quiero perder a nadie más—habló en tono bajo, eso me recordó la perdida de Ben y estado en el que se encontraba Alby.

—Está bien—le dije mirándolo fijamente—Además me gusta aprender cosas nuevas—me posicioné frente a la piedra que tenía el número 7.

Minho comenzó a explicarme cómo funcionaba el tema de las secciones y el orden el que se abrían y cerraban, me dijo que memorizara algunas rutas para volver de esa sección al Área.

—Aprendes rápido, ___—dijo mientras se acercaba a mí.

—Que puedo decir—me apoyé en la mesa dándole la espalda al mapa—Tengo una mente privilegiada—el asiático se puso frente a mi con los brazos cruzados, por lo que tuve que levantar un poco la mirada para verlo.

—No sabía que eras egocéntrica—soltó de chiste.

—Me lo estas pegando—le contesté divertida—Lo que no se me pega es tu altura—sentía su mirada fija en mis ojos.

—Eso lo puedo arreglar—se acercó y apoyó sus manos en la superficie tras de mí , dejándome acorralada entre su cuerpo y la mesa, sentía su respiración en la nariz dejando un leve cosquilleo—¿Mejor?—susurró.

—Bastante—murmuré

—Sabes, ___—dijo examinando mi rostro—Siento tu rostro levemente familiar—su respiración se volvió pesada.

—¿Acaso has soñado conmigo, Minho?—le pregunté divertida, puso una sonrisa de lado que me derritió por dentro.

—¿Quieres saber lo que he soñado?—preguntó en tono coqueto—Si quieres te lo puedo mostrar—sentí un cosquilleo en mi estómago y mi cara caliente—¿Te importaría si lo hago?—mi respiración se volvió lenta, sus ojos eran hipnotizantes, sus labios se fueron acercando a los míos lentamente, como si pidiera permiso.

—¡¡Minho, ___!!—gritaron fuera de la choza, el pelinegro soltó un suspiro.

—Lo siento—susurró en mi oído, lo que me dió un escalofrío—En seguida salimos—habló fuerte para que lo escuchara la persona de afuera, que sin duda alguna era Chuck.

—En otro momento podríamos seguir con esto—dije mientras me ponía derecha, y el se separa de a poco de mi—Ya sabes sobre las lecciones—hablé algo más fuerte, le guiñé el ojo y me acerque a la puerta, él me siguió y salimos juntos.

—¿Estás bien, Chuck?—le pregunté al pequeño, quien tenía las mejillas rojas y respiraba de forma rápida, se notaba que había corrido para llegar aquí.

—Thomas y la chica están bajando—habló de forma atropellada.

Entrelazados ♡(Minho y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora