Capítulo 13 Casi toda la verdad

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Casi toda la verdad

Es muy temprano, aún no ha amanecido pero soy incapaz de permanecer más tiempo en la cama.

Me levanto y voy directa a la ducha. Intento dejar mi
mente en blanco mientras me preparo para lo que está por venir.

Me visto y le doy los buenos días a Liam que acaba de despertarse.

-- Hola cariño, ¿preparada para el gran día? -- dice sonriendo.

-- Si bueno, hoy se esperan emociones fuertes. --

Le pido entonces que se siente un momento para ponerlo al día de la conversación que mantuve ayer por la noche con Victoria. Su cara de asombro lo dice todo.

-- Me acabas de dejar de piedra. Siempre supe que tenías cierta sensibilidad y que eras susceptible para según que temas, pero esto supera lo imaginable.--

-- Lo sé. Cuando la encontré por Internet (prefiero guardarme cierta información) sentí que debía ayudarla, aunque en ese momento no entendía cual era nuestra conexión. Ahora ya sé cual es y nada me hace más feliz que poder salvarla y recuperar la hermana que alguien un día nos robó. --

-- ¿Y cómo sabes lo de la marca de la espalda? --

No sé qué decirle....

-- Liam hay preguntas que no puedo responder. Simplemente lo sé. --

-- ¿Y tus padres? ¿Has pensado como se lo vas a decir?....--

-- Vamos poco a poco, por ahora solo Victoria, tú y yo lo sabemos. Debemos esperar a tener pruebas reales. --

-- Si, es mejor mantener la calma y esperar a los resultados. --

-- Victoria nos va a acompañar a la clínica, ¿te quedas tú con Elena? --

-- Si, pero en cuanto sepas algo me informas. --

Salgo del dormitorio y me dirijo al salón donde ya me esperan Valeria y Victoria.

Nos montamos en el coche y tomamos rumbo a la clínica, estamos nerviosas, para qué negarlo...

Llegamos y sale a recibimos el doctor que nos atendió días atrás.

-- Buenos días, pues ya ha llegado el día de saber si son compatibles o no. Pasen por aquí, les vamos a sacar sangre y en un par de horas tendremos los resultados. Les recomiendo que en ese tiempo vayan a la cafetería a desayunar, necesitarán recuperar fuerzas después del ayuno de hoy. Además Valeria está débil y no es aconsejable que esté mucho tiempo sin comer. --

Colaboramos con el doctor en todo lo que dice y tras la extracción nos dirigimos a desayunar. Y entre bocado y bocado....

-- Oye Valeria, cuando hablamos el otro día dijiste que tu madre no te había dado muchos datos sobre tu adopción, ¿por qué no se los has pedido? -- le pregunto.

-- Bueno, siempre que sacaba el tema mi padre o ella lo zanjaban y apenas me han dado la oportunidad de conocer mis orígenes. De haber conocido a mi
familia biológica quizás ya podría haber sido trasplantada y mi situación sería diferente. -- se queda pensativa y triste.

-- Quizás eso cambie....-- le digo mientras Victoria casi se atraganta al dar un sorbo a su café.

-- ¿Cómo? -- pregunta extrañada.

-- El otro día llamé a mi madre y le pregunté quien la atendió en el parto de una hermana mía que se supone murió al nacer y me dijo que un medico latinoamericano cuyo apellido era Pedraza. --

Valeria empieza a masticar más lentamente mientras pone mucha atención en lo que digo. Victoria sin embargo está cada vez más nerviosa y no sabe donde meterse....

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