end game , matias mansilla

☆ . xiv

" MIEDOS "
17.03.2024 , azul's point of view

El partido entre Estudiantes y Boca por la fecha diez de la copa de la liga transcurría con normalidad, no había jugadas demasiado importantes y si bien Boca estaba jugando mejor que Estudiantes, no era peligroso. Momentos antes de iniciar el partido, incluso, el club había reconocido a mi abuelo, Juan Ramón, por sus ochenta años. Toda mi familia estaba en cancha hoy y teníamos planeado ir a cenar después del partido.

Ya habían pasado los 25' del primer tiempo cuándo Javi Altamirano se desplomó en el campo de juego, rápidamente me levante e ingresé junto a mis compañeros al campo de juego; la situación era confusa, se cayó de la nada y primero pensé que se había desmayado pero no, su cuerpo temblaba.

— ¡No lo agarren! — Ordené con nerviosismo cuándo vi que lo estaban agarrando demasiado fuerte, Enzo había metido su mano en la boca de Javier para evitar que se trague la lengua — Esta convulsionando ¡Trae a la ambulancia!

Todos parecían moverse más lento de lo normal, mi cuerpo temblaba de los nervios y todo se escuchaba en eco, la cabeza me retumbaba.

La cancha se había enmudecido y lo único que escuchaba eran los sollozos de Enzo y el rusito Ascacibar, que estaban conmovidos por el miedo, las indicaciones de Valentini a la ambulancia y el ruido de los temblores que estaba teniendo Javier.

Los camilleros lo subieron a la ambulancia y fue como si la vida se me estuviera pasando en un segundo; hace un momento lo tenía al lado mío y ahora la ambulancia acababa de desaparecer.

No sé cómo, pero me paré y me di un segundo para tranquilizarme y orientarme nuevamente.

— Azu, hija — Mi papá había aparecido al frente mío y me estaba agarrando por los hombros. — Mirame, Azul, ¿Estas bien?

— ¿Que le pasó? — Pregunté aún temblando — ¿Y Javi?

— Se lo acaba de llevar la ambulancia, hija. ¿Te sentís bien?

Mi papá me miraba como si estuviera viendo un fantasma, no entendía nada de todo lo que pasaba a mi alrededor.

— ¿A dónde lo llevaron? Tenemos que ir, es nuestro amigo. ¡¿Y si le llega a pasar algo?! ¡Va a ser papá en unos meses!

Volví a romper en llanto y mi papá murmuró palabras que no escuche, una sensación extraña se apoderaba de mi cuerpo.

— Lo van a suspender — Explicó y supuse que hablaba del partido — ¿Querés venir a casa?

Negué con la cabeza — No, no, me voy a la mía.

Las plateas comenzaban a vaciarse, la gente se iba y el plantel se metía en el vestuario para cambiarse. No entendía que había pasado ¿Cómo podía pasarle eso a un jugador de fútbol, que se supone que se hacen estudios para evitarlo? ¿Que nos dejaba exentos al resto, que nos aseguraba que no podía pasarle a cualquiera? Javier iba a ser papá, tenía una familia, estaba sólo en el país, si llegaba a pasarle algo ¿Que iba a hacer Macarena? ¿Que íbamos a hacer nosotros? ¿Cómo se afrontaba una situación así?

— Vamo' a casa — Mati se agachó frente al banco de suplentes, dónde yo seguía sentada. Su cara demostraba comprensión, pero también se veía el miedo por Javi, el miedo por lo que estuviera sintiendo el otro.