Violentómetro / DabiHawks

Ley del hielo

Al otro día el pelinegro no había soltado ni una sola palabra, eso estaba matando a Keigo, se sentaba a su lado y le hablaba, incluso llegó a llorar al ver cómo lo ignoraba.

Se sentía desesperado porque aquel silencio lo estaba matando.

— Touya perdón… — le dijo al pelinegro mientras le tomaba la mano .

El pelinegro lo miro indiferente.

— ¿Qué? — respondió Touya.

— Es que estos días han sido difíciles… no soporto que me trates así, siento que estoy haciendo algo mal pero no me lo dices …

— Deja de ser tan intenso…

— Amor por favor.. se que nuestra vida es difícil, pero intento trabajar para poder tener una vida estable, pero no quiero descuidar nuestra relación… dime que te molesta de mi …

Touya miraba sin expresión alguna al rubio pero no dijo nada, eso lastimaba a Keigo.

— Mi amor… háblame por favor… no puedo soportar estar de esta manera, si pasa algo dímelo por favor… — rogaba entre lágrimas mientras miraba al otro. — Dime qué hice para que estés así…

Touya se levantó y salió del departamento dejando en lágrimas a Keigo.

Pasó la noche llorando, estaba desesperado por saber que le había sucedido a su novio, ellos se amaban tanto que pareciera que no son los mismos.

Cuando recién se conocieron claramente Touya ya estaba metido en drogas, pero se escapaba de su casa para ver al rubio que había conocido en una fiesta, desde que Touya puso sus ojos en Keigo no dejo de seguirlo para que esté se fijará en él, los padres del rubio lo odiaban por ser "un mal hombre" y porque no podía darle lo que merecía al rubio, Keigo amaba a Touya y también se escapaba para ver a su amado, su relación fue apresurada pero no podían negar que se amaban, cuando empezaron a vivir juntos Keigo empezó a notar que no todo era color de rosa, el consumo de sustancias de su novio era un problema entre ellos al igual que su actitud agresiva, pero confiaba en que cambiaría .