Odiada Por Mi Alfa

Capítulo 48 de 75 -Capítulo 12

AURORA

Nos encontramos con Alfa Magnar en el comedor, donde se servían todo tipo de manjares.

No me había dado cuenta del hambre que tenía hasta que mi estómago decidió hacer ruidos vergonzosos. Estaba  segura de que todos los lobos de la sala lo habían oído, gracias a su agudo oído.

Me agarré rápidamente la barriga mientras intentaba ocultar mi cara, que estaba completamente roja, Wolfang se río detrás de mí.

La estruendosa carcajada de Alfa Magnar resonó en toda la sala.

-No hay necesidad de avergonzarse, Lady Aurora. Si tienes hambre, ¿no se prive!.

Nos indico que tomáramos asiento.

Obedecimos y las sirvientas colocaron los platos delante de nosotros, llenos hasta el borde de comida.

Cuando me metí el primer tenedor en la boca, no pude evitar el gemido de satisfacción que se escapó de mi boca.

Alfa Magnar volvió a rugir de risa.

Maldita sea, parece que estoy aquí solo para divertir a este tipo.

-En fin. ¿Habéis encontrado algo útil en nuestros registros? -preguntó Magnar.

-En efecto alfa. Y parece confirmar una información que obtuvimos en el camino  hacia aquí, sobre una mujer que vive en Nome -respondió Wolfgang.

-¡Es una noticia maravillosa! -dijo.

Justo en aquel momento, oímos un alboroto al otro lado de la puerta y luego alguien irrumpió en la sala.

-No me importa que tenga aquí a la reina de Inglaterra, necesito hablar con él -resonó una voz quejumbrosa, una que no había escuchado desde antes de ser cautiva de Klaus.

Rhea comenzó a gruñir en mi mente.

-¿Qué coño está haciendo ella aquí? -se quejó.

-¿Tallulah? ¿Qué significa esto? -Alfa Magnar habló mientras todos mirábamos fijamente a la loba que estaba de pie, conmocionada, mirándonos a Wolfgang y a mí.

-Estos son mis invitados, Tallulah. ¿Qué estás haciendo aquí? No te han anunciado como visitante -dijo Magnar, y por primera vez vi a un alfa serio usando su aura autoritaria.

-¿Tus invitados? -se burló-. Un supuesto alfa sobre cuya virilidad tengo mis dudas y una inútil y humilde doncella omega. Vaya clase de invitados que tienes.

Sentí que mi sangre empezaba a hervir, pero hice lo posible por mantener la calma. Rhea, por su parte, estaba dispuesta a lanzarse sobre la rubia. Magnar se levantó de su asiento.

-Tallulah Wilhelm. No toleraré ningún tipo de falta de respeto hacia el Alfa y la Luna de la manada Luna de Sangre -gruñó. Fulminó con la mirada a la recién llegada-. 'Cuál es el propósito de tu visita? Como he dicho antes, te has presentado sin anunciarlo previamente.

Me miró fijamente y luego a Wolfgang con incredulidad.

-Entonces, ¿vas por ahí nombrando a cualquier tu Luna? -le dijo Wolfgang mientras me miraba fijamente.