Mother

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Leah Morgan Judson

Bajo del avión y corro hasta lo brazos de mi padre que me esperan abierto, Dios como lo extrañe es un idiota gilipollas pero lo amo.

— Oficial Judson a su servicio coronel. — Me es innevitable que una sonrisa no me salga.

— Bienvenida al comando soldado.

— No seas idiota papá dame mi abrazo.

— ¿A quién diablos le dices idiota?

— A ti — Veo sus ojos grises que gritan tormenta son iguales a los míos.

Borro mis sonrisa al separarme y ver a una ojiazul que deduzco a de ser su prometida se claro su nombre.

Rachel James, un buen soldado pero pesima persona bueno a mi gusto se que papá se metio con ella cuando era la novia de su mejor amigo y que volvieron a los mismos pasos cuando ella volvio de su exilio.

No me agrada hay algo que no me gusta en ella puede que tenga que ver con la infidelidad y eso es algo que no puedo evitar.

Odio las infidelidades y a las personas que lo son supongo que se debe a que mi padre le fue infiel a mi madre cuando eran novios y aunque amo a mi padre eso es algo que siempre estara en mi.

Mi madre, Alana Judson fue novia de mi papi cuando el tenia 15 y ella 16 por lo que se el le fue infiel por eso la razon que mi papi se enterara de mi exsistencia hasta cuando cumpli 5 años pero tambien porque mi madre murio de no haber sido asi nisiquiera estaría aquí.

Salgo de mis pensamientos cuando carraspean y veo a la ojiazul acariciar su plano vientre.

— Leah te presento a Rachel mi... — No dejo que termine cuando hablo.

— Tú prometida ya lo se

Sonrio incomodamente el sabe como soy así como debe saber que me cae mal, no sere grosera pero que no esperen que llegue diciendole mamá.

— Un placer Leah tu padre habla maravillas de ti eres muy hermosa

— Gracias lo saque a mi madre, un placer tambien teniente James

— Llamame Rachel seremos familia y dentro de meses seremos más no se si Chris ya te dijo que...

— Que estas embarazada lo se si no la novia de esta boda no serías tu.

No dice nada pero veo la furia en sus ojos, miro a mi papá y busco algun regaño pero el solo niega restandole importancia.

— Vamonos te quedaras en el pent house.

— Marie estara ahí?

— Esa mujer ya no vive en mi casa — Rachel explica

— En ese caso prefiero quedarme aquí, ¿aun esta mi habitación verdad?.

— Tu habitación si pero no se si esta limpia 

Amo que mi papi se preocupe por mi, que conmigo sea otro que estoy segura no es con nadie más, supongo que me sigue viendo como aquella niña de cinco años que conocio y no quiere ver que ya tengo quince.

— Los Morgan no le tenemos miedo a nada y eso incluye el polvo.

Se acerca para darme un beso en la frente y darme una de sus targetas.

— Te espero para cenar.

Asiento mientras veo como se marcha con la mujer esa, camino contenta arrastrado mi maleta llendo hacía los dormitorios, justo por ir distraida viendo todo me topo con un mujer y termino botando sus cosa.

— Mierda lo siento — Me agacho para ayudarla.

— No pasa nada fue mi culpa no te preocupes 

Al oír su voz la escucho como rota, apagada, como si estuviera mal entonces veo su semblante y al parecer tiene los ojos hinchados. Termino de ayudarla y nos levantamos.

— De nuevo lo siento

— No pasa nada, tranquila — Levanta la vista y yo me topo con unos ojos cafés hermosos que me dan una sensación de calidez. — Gema Lancaster, mucho gusto.

Abro la boca sin saber que decir pero estrecho su mano.

— Leah, un placer.

— Igualmente Leah lamento distraerte venía en mis cosas pero si necesitas algo puedes buscarme.

— Gracias y si necesito un favor podrías decirme donde consigue implementos de limpieza.

— Claro si quieres pero ire a dejar esto a mi cuarto y puedo acompañarte.

— Muchas gracias igual yo debo dejar esto — Señalo mi maleta — Donde queda tu cuarto?

— Por allá?

Me parece mentira que su cuarto este justo al lado del mío, siempre he tenido el mismo cuarto en la central, papá me lo dio cuando el debia quedarse a trabajar entonces me acompañaba y si necesitaba algo solo iba a su oficina y volvia.

— El mio tambien.

Solo asiente y comienza a caminar conmigo, empezamos a hablar de cosas triviales hasta llegar a la puerta ella entra y yo hago lo mismo evitando tocar algo todo tiene polvo pero con una limpieza se arregla.

Salgo cuando escucho su puerta cerrarse y me permito detallarla mejor, labios finos, piel morena y ojos cafes unos muy hermosos estoy segura que el hombre que este con ella es muy afortunado la acabo de conocer pero se que una gran persona.

— Dime Leah que te trae por Londres?

Ella comienza ordenando cosas como si fuera profesional y por alguna razón me siento comóda hablando con ella.

— Vengo a la boda de mi padre has de conocerlo es el coronel y...

Veo como el rostro de cambia y esa alegría desaparece para poner una cara seria.

— No sabía que eras su hija pero si lo conozco — Limpia una pequeña lágrima que había caigo — Demasiado bien.

— Oh entiendo bueno es mi padre se va a casar y aunque no me agrade su prometida pues si lo hace feliz bien por el ademas esta embarazada.

— Si su embarazo fue un completo milagro.

— Enserio? eres su amiga o algo por el estilo? — Tomo un plumero limpiando los muebles.

— No yo soy la ex novia si podría decirse eso de tu padre.

Sin pensarlo mi mente me recuerda a mi abuelo Alex quejandose de las estupideces de mi padre y Rachel. 

— Dios lo siento tanto no tenía idea.

— No pasa nada Leah mejor cuentame de ti.

— Bueno me llamo Leah Morgan Judson, tengo 15 años mi madre murio cuando tenía 5 y por eso conocí a papá, soy oficial y vivo en Rusia.

— Ahora veo porque mi madre viajaba a Rusia

— Tu madre?

— Marie 

— Oh Dios tu eres la Gema de la cual ella se la pasa hablando eres mucho mejor en persona.

— Gracias no pense que ella hablara de mí.

— Si bueno me contaba que salías con mi papá y sin conocerte supe que me caerías bien pero ahora que lo hago pagaría porque fueras tu la prometida de el.

— No soy su prometida pero podemos ser amigas.

— Espero y seamos las mejores amigas Gema.

— Lo seremos Leah lo seremos.

Me sorprendo cuando me abraza pero solo acepto, se siente como si fueran los brazos de mi mamá y es la mejor sensación del mundo.



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