One Shots

Traitor II

Amaya Johns

Las lágrimas bajan al ver la demanda de divorcio entre mis manos, a este punto no se que me duele más su traición o que se haya rendido tan fácil, tal vez Bratt tiene razón y lo nuestro fue solo una simple fantasía que el y yo misma exageramos haciendonos ver un amor tan fuerte que no era así.

El era celoso conmigo yo también, siempre fue así un circulo de celos donde el siempre salía perdiendo, siempre le oculte cosas por celos, sobre todo cosas relacionadas con una mujer.

Gema Lancaster

La hija de Marie y él siempre fueron cercanos eapesar de que la trataba mla el siempre le permitía estar, la primera vez que los vi la bilis me subío por el esofago al pensar que eran novios luego ella se fue a Nueva York pero siempre lo llamaba hasta que cuando Chris se convirtio en mi novio yo le mentí a Gema para que dejara de buscarlo, le marque cuando Chris y yo teníamos relaciones, le dije que el le mandaba a decir que l dejara de buscar que estaba harto de soportarlo y su única respuesta fue dile que le deseo lo mejor.

La culpa era algo de mi día a día, el reclamo que me hizo cuando le dije que queme sus fotos de niño donde ella salía eran más que justificados y yo simplemente le decía que exageraba, que el pasado no importaba que forjaríamos nuevos recuerdos.

— ¿En que piensas ? — Bratt me saca de mis pensamientos mientras pone la taza de café frente a mi.

— No soy una santa Bratt, cuando descubrí la infidelidad me dolió demasiado y cuando llegue a tu casa con ganas de vengarme de él lo primero que hice fue ponerle una orden de restricción a Chris, no puede ver a Leo y hoy me llego esto — Le muestro la demanda de divorcio — En el documento él casi súplica y dice que esta dispuesto a darme todo lo que yo quiera, dinero, negocios lo que sea pero que le permita ver a Leo y se que puedo dejarlo en la total quiebra si quiero, pero no me siento bien haciendolo, mi hijo llora todas las noches y se que es mi culpa, Chris al dia siguiente me llamo diciendo que haría lo que fuera con tal de ver a Leo como respuesta yo lo aleje más de él, nunca se quiso desentender de nuestro hijo y yo solo lo alejo más.

— Se lo merece Amaya, el te lástimo, te traicionó si se muere se lo merece.

— El tal vez se lo merezca Bratt pero mi hijo no, se la pasa repitiendo la palabra papá, cada que llora solo se calma cuando escucha los audios de él — Suelto un suspiro — Dandole un castigo a Christopher también hago sufrir a mi hijo y eso no esta bien.

— ¿Y que haras?

— Primero retirare la orden de restricción, segundo tramitaremos el idivorcio y tercero seguir adelante, de amor nadie se muere y no pienso ser la primera.

***

El hombre al que amo termina de firmar los papeles sentado a mi lado, me pasa los papeles y con la mano temblando tomo el boligrafo, tomo una bocada de aire y estampo mi firma.

Ya no hay vuelta atrás, esta hecho...y duele, mucho pero tranto de ocultarlo

— Bien señores es oficial, vuelven a ser los mismos que eran antes del matrimonio, la custodia del menor Leonel Morgan Johns queda en estado de compartida, a manera que el señor Morgan debera pasar todos los días establecidos en la sesión que se tuvo para ese tema, me retiro veo que necesitan tiempo para hablar.

El hombre sale dejandonos completamente solos, el sielncio en el que nos sumergimos se rompe cuando el habla.

— Perdoname Amaya, se que fui un completo imbecil al destruir la familia que teníamos

Volteo a verlo y las lágrimas que guarde durante todo el tiempo que estuvimos sentados salen cargadas de dolor.

— Me lastimaste y mucho, te odie, te reproche, re llore y yo también te lastime, nunca ebí intentar separarte de Leo sabía que el es tú mundo y quise destruirlo así como tu destruiste mi corazón.

— Mis problemas eran contigo no con Leo, el siempre va a ser mi prioridad y ese día no te mentí, no te acompañe por ir a follar con Rachel, estaba en una reunión con Alex — Asiento porque se que es cierto. — No importa que cosa puede pasar entre nosotros o cuanto podriamos llegar a odiarnos Leo siempre no va a unir.

— Lo se

Volteo a ver a otro lado y despúes de mucho hablo.

— ¿Supongo que esto es el fin?

— No lo se

— Digo ambos nos distruímos mutuamente, lamento que no hayamos podido llegar hasta que la muerte nos separara

— Y ya que es el fin, ¿me dejarás provar tus labios por ultima vez?

No le respondo, simplemente me acerco lo suficiente para que el deduzca lo que le quiero dar a aentender, sus labios comienzan a rosar los míos lo veo una ultima vez de estampar mis labios contra los suyos, el beso cargado de melancolía, con el pequeño amor que aún sentimos, con odio, con dolor pero más con sufrimiento sabiendo que es la ultima vez que lo beso, que es la ultima vez que estare tan cerca de el y eso mata.

Me separo y le sonrío, acaricio por ultima vez sus mejillas como solía hacerlo al despedirlo en las mañana, todo lo hacemos igual salvo que ya no habra otra vez que lo volvamos a hacer.

L esonrío y salgo del juzgado, respiro muchas veces para intentar calmarme, desde que descubrí que me fue infiel he buscado miles de respuestas con preguntas que nunca son respondidas.

Nuestro amor era lundo pero no para durar para siempre, desde hace tres años hemos sido una cuenta que va hacía atrás en lugar de ir para adelante, desde que nos casamos nos hemos estado persiendo uno al otro en lugar de seguirnos encontrando, fuimos felices pero no lo suficiente para que durara para siempre.

El fue el hombre que más he amado y que más que me ha lastimado pero me enseño dos cosas, porque mientras me amo lo hizo de la manera más maravillosa en la que pudo y se que no debo conformarme con menos y tambien me enseño que no importa si lo hizo con intención o no si alguién me lastima debo saber que si no quiero volver no debo hacerlo.

El fue mi alma gemela de eso estoy segura, me regalo a lo más importante que tengo que es a mi hijo y me dejo miles de recuerdos de la hermosa familia que fuimos, esos que ahora llevo en mi corazón pero ahora son solo eso memorias.

Es momento de empezar de nuevo, he caido y me he levantado, soy fuerte y lo voy a lograra.