Go Far

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Gema Lancaster

Las lágrimas bajan por mis mejillas pero nadie me ha prestado la atención suficiente, estar aquí duele más porque vi como el luchaba por ella.

No importa si soy su novia o prometida ellos siempre serán primero y eso duele, quema, siento los brazos de Liz y solo me recuesto en ella, no quiero hablar solo llorar.

Llevaran a Rachel y Angela al hospital y yo bueno el resto que no somos importantes podemos morir sabiendo que a nosotros no nos buscara.

Me hes innevitable no dejar de pensar que si la secuestrada hubiera sido yo y Rachel, probablemente me hubieran dejado morir porque en la central todos somos irreplanzables menos los que los Morgan aman, por ellos queman el mundo.

Mientras todos van al hospital yo me dirijo al pent house y me cambio de ropa no sin antes tomar mi arma.

Me dirijo al callejón que esta en la puerta trasera del salón donde fue mi fiesta, los recuerdos más amargados de mi vida en ese momento no me imposto que Chris estuviera con ella, eso fue nada a comparación de lo que el maldito me hizo.

Bajo del auto y camino a paso decidio y lo encuentro de pie recostado en la pared mientras le da una calada a su cigarro.

— ¿Estas tranquilo cuando abusas de miles de mujeres aquí?

Hablo llamando su atención mientras el me observa, el callejón es oscuro pero se que me reconio, lo hizo esa noche lo hará ahora.

— Pero si es la preciosa morena — Se acerca y mi valor tambalea — ¿ Vienes por otra ronda?

Intento mantenerme serena pero no puedo, no cuando el hombre que me causo pesadillas esta frente a mi, no cuando ese desgraciado me violo apesar de mis suplicas siendo un completo desconocido.

— Maldito tú me violaste — Las lágrimas luchas por salir pero las retengo.

— Yo no hice nada preciosa simplemente vi a una linda morena que quería ser follada por mi.

— ¡ESTAS ENFERMO!

— No hagas drama dios ahora entiendo porque tu novio te cambio por otra.

Sin pensarlo suelto el primero disparo hacía su entrepierna, no se que pasa despúes entro en un bucle pero el hombre jadea herido y yo veo el pedazo de vidrio en el suelo, lo tomo y lo acerco a su cuello pasandolo dejando ver el hilo de sangre que comienza a salir.

— Esto es por mi, por todas las mujeres a las que has toca pero más por mi hijo que tuvo la desgracia de ser engendrado por un violador como tú.

Sus ojos pierden vida poco a poco y el enorme peso que llevaba desde que me violo desaparecio, veo su parte en el suelo junto a sus testículos mientras la sangre sigue brotando de su cuello.

Estoy llena de sangre pero no se compara a lo sucia que me sentí el día de cumpleaños, como tuve que volver a la fiesta y hacer como si nada pasara, llegar al pent house y llorar hasta quedarme dormiday al día siguiente seguir siendo la perfecta novia del coronel.

Le doy una última mirada al cuerpo y salgo de ahí, manejo hasta el pent house y comienzo a empacar mis cosas, no me ire hoy pero mientras más rápido tenga todo será mejor, mañana debo dar una conferencia de prensa y ir al hospital donde todos estan al pendiente de la salud de Angela y Rachel.

Me duele dejar a personas buenas que me han apoyado, a Liz que es la única amiga que tengo, a Laurens quien me ofreció amistad sincera, a Maggie que al igual que su madre supo ganarse mi corazón y a todos esos niños, mujeres, hombres que visitaba ellos que solo veían lo bueno en mi.

Pero debo sanar sola, lejos de todo lo que alguna vez me lastimo y buscar ser la mejor madre para mi hijo o hija, que este bebé sea fruto de una violación no lo hace indeseado para mí, siempre quise ser madre y el o ella llego para demostrarme que dentro de esa horrible experiencia puede haber algo de luz.

Limpio la lágrima que resbala por mi mejilla y entro al baño para limpiarme, tendré que quemar la ropa pero no importa ahora mi alma siente algo de paz al saber que ese tipo ya no hará mas daño.

***

Los flashes de las camáras me aturden pero sonrío dandoles la última foto que tendrán de mi sin ellos saberlo, desde que desperte esta mañana estaba feliz porque dejaría todo este dolor atrás, porque ver a Christopher luchar así por Rachel me hizo darme cuenta que no importa que haga el nunga luchara así por mí y no dolío tanto como pensaba que lo haria, se sintio esperanzador saber que tengo un mundo fuera de Londres, uno donde puedo sanar a mi tiempo y no se tal vez el amor no sea para mí.

Me despido de la prensa mientras le digo a los guardias que ire al pent house que no es necesario que me sigan, gracias a Dios me hacen caso, manejo hasta llegar solo tomo mi maleta y dejo el anillo de compromiso en la mesa de la sala, Zeus sale gruñendo como siempre pero no le hago caso.

Apesar de estar feliz mi mente se llena de nostalgia al recordar los momentos buenos fueron pocos pero hubo, siento una lágrima bajar pero no es de tristeza es de melancolía de saber que no volvere aquí, es de miedo y a la vez de alegría de saber que una nueva vida mi espera.

Subo al elevador y pongo una mano en mi vientre, le doy una última vista al pent house y antes de que las puertas se cierren hablo.

— Es hora de irnos lejos y comenzar una nueva vida — Mi vista va a mi plano vientre — Prometo ser la mejor madre para ti.

One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora