One Shots

Help II

Bratt Lewis

— Sabrina, ¿cuál se mira mejor? — Le muestro los dos sacos que tenía tendidos en la cama

— No lo sé Bratt, lo dos se miran bien — Habla sin despegar la vista de su celular

— Se que los dos se miran bien pero quiero saber cual se mira mejor

Ruedo los ojos cuando no me presta atención y tomo un último respiro, maldigo al ver la hora en el reloj, mierda voy tarde, tomo uno de los sacos sin pensarlo mucho y salgo corriendo.

Me subo a mi auto y manejo hasta el departamento de Meredith, al llegar me alivio cuando noto que aún no ha bajado, tomo el ramo de flores que había dejado en el asiento del copiloto y pongo mi mejor sonrisa cuando aparece por la puerta.

La respiración se me corta cuando la pelirroja sale con un vestido rojo que dejaría mudo a cualquiera, como no si se le ciñe a la perfección, los labios del mismo color le dan el toque a su piel que sobre sale al lucir blanca como la nieve.

— ¿Se quedará de pie o nos vamos? — Ella misma me saca de mi ensoñación cuando habla

— Claro, lo lamento — Aclaro mi garganta y le extiendo el ramo de flores — Espero te gusten las flores

— Son hermosas, muchas gracias

Asiento sin darle más vueltas al asunto cuando no se que más decir o hacer, le abro la puerta del auto y ella sube, volteo la vista cuando la abertura de su vestido revela más de sus piernas, doy la vuelta entrando al lado del piloto y comienzo a manejar.

Al igual que en la boda la plática comienza a fluir de manera organica, no se como lo hace pero cada que hablo con ella siempre termina sacandome una sonrisa, llegamos al restaurante y la ayudo a bajarse, le entrego mi auto al valet y le ofrezco mi brazo antes de entrar, acepta con una sonrisa y el ambiente tranquilo nos inunda al entrar.

Uno de los meseros no lleva a nuestra mesa, sonrío al ver que es tal cual la pedí, alejada del resto y en la terraza, el frío nos pasa factura sin embargo no le prestamos mucha atención.

— Me alegra que hayas aceptado — ¿Por qué mierda sueno como puberto?

— No hay de que, nunca esta de más una invitación a cenar — Lo dice de manera sonriente mientras levanta la copa de vino — pero porque mejor no me dice como ha estado estos días despúes de lo que paso

— Mejor, la verdad mi familia me ha apoyado mucho al igual que una buena amiga

— ¿Ah sí?, y ¿comó es esa amiga? — recuesta sus brazos sobre la mesa y me ve divertida

— Es una muy buena pero sobre todo muy guapa — mi lengua se suelta de más y se que la cague cuando Meredith se sonroja

— Vaya, se que si es una excelente amiga, tal vez la conozca y no se, hagamos algo los tres...

— Bratt!!!

Ambos volteamos al escuchar a la voz femenina en nos interrumpe, cuando veo a mi mamá caminar hacía nosotros me siento como un niño que fue descubierto haciendo una travesura.

Martha Lewis me ve serie con una mirada que exije una explicación, Meredith se remueve nerviosa y yo me levanto rápidamente.

— Mamá, ¿qué haces aquí?

— Vine a cenar con unas amigas — Encarna una de sus cejas antes de volver a hablar — ¿no me vas a presentar?, pensé que te había educado mejor

Asiento enrvioso y de la nada siento como las manos me sudan, aclaro mi garganta y señalo a Meredith con una de mis manos.