Un alfa cruel

#-15 siendo sinceras

Laura

La casa es un sueño, es más de lo que nunca imaginé y lo mejor  de todo es que se siente  como un hogar. La familia  Terrier como prometio regreso al día siguiente, cargados de juguetes  para Lucy al parecer es costumbre donar todos los juguetes de los bebés anteriores, tenia la casa llena  de artilugios pero a mi pequeña  le encantaba todo. Nos adaptamos muy rápido a la vida en la comunidad, como yo tenía a la bebé  cuando  alguien  no se sentía  bien  venia hasta mi casa para que yo lo revisara  y según mi diagnóstico  compraban los medicamentos  en el poblado.  Elena se ofreció más de una vez  para cuidar de ella, así yo podría trabajar  mas tranquila, pero  no podía, no  quería correr riesgos. Ellos se estaban volviendo parte de la familia.

Una tarde mientras Elena me daba clases  de cosina vi como el alfa Tristan la colocaba en su pecho, sabrá la verdad?  Le hacía historias sobre  la diosa Luna, la manada y la familia Terrier.
Elena: pronto estará terminada la pequeña clínica para que puedas trabajar.
Lulu: no se si sea buena idea sacar a Lucy de casa tan pequeña.
Elena: sabes que puedes  dejarla conmigo  cuando  quieras, yo no tengo  mucho que hacer  y Tristán me puede ayudar, lo malo del retiro  es que  se queda uno sin muchas opciones y la pequeña  es aire fresco en nuestra vida.
Tristan: déjala Elena, la chica aún no está lista.
Lulu: lista para qué?
Elena  me miró con tristeza y su esposo  resopla antes de volver  a hablar.
Tristan: para contarnos la verdad...sabes soy un alfa  viejo pero  hasta que me muera seguiré siendo  un alfa, a mi no me lo puedes ocultar.
Lulu: no se de lo que me es hablando. ( le conteste algo nerviosa)
Tristan: seguro  tienes tus razones para ocultarlo  y no se de cual de mis sobrinos es esta bebé pero el hecho de que estés aquí  escondiéndote me da una idea.
Lulú: cómo?
Tristán: el olor, se que es una Terrier, cualquier  alfa lo sabría solo de estar cerca de ella, incluso  tu hueles a Terrier.
Lulú: yo? Yo
Elena: no tienes  que decirnos nada cariño, nadie más lo sabrá, solo Tristan podría, en este pueblo es el único alfa, bueno  y Victor pero lo sabes también.
Víctor lo sabe? Claro que lo sabe por eso me hizo poner  todos esos aromatizantes cuando  pasamos  por el pueblo para que  nadie nos detectara entre tantos olores.

Elena: estamos contigo no tienes que preocuparte por nada, ahora  somos familia, de acuerdo, confía  en nosotros. Sabemos que estas aquí  por tu infinito amor hacia tu hija, ella  es la que necesitas estar aquí.
Mis ojos se llenan de lágrimas y Elena me abraza, vuelvo a mirar al alfa y lo veo con la pequeña  mota de pelo en sus manos. Pero  como? El ve la preocupación en mi rostro y me sonríe.
Tristán: no te preocupes, no es la primera  ves que  lo haces.
Elena: por eso ahora  venimos  más que antes, sabemos  que ella nos necesita y tú también, así que déjanos ayudarte.
Yo solo puedo dar las gracias  por tanto  afecto y seguir con las clases de cosina por ahora mi pequeña toma leche pero  pronto empesara a comer y tengo  que saber  hacer  algo, aunque sea pure. Pasamos una buena  tarde. Se que esta tranquilidad  no será para siempre  pero  espero que  dure mucho años.

Ocho meses ha cumplido  el angel de mi vida. En estos meses todo  ha sido tranquilidad. Ya conozco  a todos en el poblado del lago por algún motivo u otro todos han pasado por aquí. He podido  aprender  más sobre los lobos y su vida, aunque hay algunas que no las entiendo. He hecho amigas con las que salgo una que otra vez a  charlar y tomar alguna cerveza en el bar.
Con el matrimonio Terrier me llevo  cada  vez mejor, mi hija los adora y yo los veo como familia, nunca más volvimos a hablar  sobre ese tema, pero me ayudan con todo lo que  necesitamos.
Estamos en otoño y pronto  llegará el invierno y todas las familias  se reúnen para hacer un festival. Al parecer asisten de los otos poblados, incluso  se quedan en cabañas para participar en la celebración. Elena  me aseguró  que los alfas de fuera  no tienden a asisten y menos los Terrier, solo las demás clasificaciones para participar  en las competiciones que preparan, incluso  sacan ganadores y todo, eso lo quiero  ver, será divertido.

Tirion sigue llamando  cada día, hace las videos e incluso  ha venido de manera  discreta y se queda alguna vez, de hecho se fue hace un par de horas. Los dos alfas estuvieron jugando en el jardín convertidos en lobos durante horas. Ahora  mi pequeña sigue  allí por momentos  se transforma en bebé y juega  con la tierra pero  cuando  quiere trasladarse vuelve  a convertirse y sale dando  brincos, no puedo  quitarle la vista  de encima así que la voy persiguiendo por donde  quiera  que va.
-Qué se supone  que es esto?
Escuche que alguien  habló detrás de mí, me voltee y pude ver a una mujer de unos 40 años un tanto  alterada.
- se puede saber  quien eres tú y que haces con mi marido.
Lulú: lo siento  señora pero  no se de lo que me habla.
- lo vas a sentir  de verdad si no me contestas rápido? Que hacía Tirion aquí?
Ya valió madres  esta es la Luna de la manada  luna verde.
Lulú: soy Ana mi luna, soy nueva  en la reserva y...
- y un carajo, hace meses que viene hasta aquí, dime la verdad o te lo saco a golpes.
Lulú: aquí  no hay cobertura pero  si vamos a otro lado más tranquilas podremos llamar Tirion y..
- llamar a Tirion?  Es el gran  alfa  para ti, no seas insolente.
Lulú: es verdad  ... el gran alfa para que se lo explique.
- me lo vas a explicar  tú  y ahora, te queda claro.
Escuchamos  unos pequeños  gruñidos y buscamos a la causante del alboroto, estaba caminando  hasta mi poniéndose en posición de ataque. Me estaba defendiendo, no pude  ser más hermosa  mi bebé.
- pero que es esto? Un alfa?
Lulú: yo puedo..
- cállate mejor, entre lobos nos entendemos.
Se agachó al piso  y le mostró las manos, dejo de hablar mientras  mi hija la olía, en un momento se convirtió  nuevamente  en bebé para tocar las  manos de la señora  de la que todavía  no me sabia el nombre, pero  de lo que si estaba segura era que era la madre de ese lobo.
- vamos a dentro, tienes  muchas cosas que explicar.
Lulu: siendo  sincera no sabría por dónde  empezar.
- por el principio...siempre  por el principio.