Durante la siguiente semana, ambos se prepararon para el primer desafío, propuesto por Bradley. Max intentaba mantenerse concentrado en sus estudios, aunque seguía dándole más prioridad a otros aspectos de su vida.
El día del primer desafío llegó y Max, PJ, y Bobby se encontraron en el skatepark. El lugar estaba más concurrido de lo habitual, con estudiantes ansiosos por ver la competencia entre Max y Bradley.
—¿Listo, Max? —preguntó PJ, dándole una palmada en la espalda.
—Nací listo. Vencí a Bradley una vez, puedo hacerlo dos veces —respondió Max, ajustando su casco.
Bradley llegó poco después, su expresión decidida y enfocada a ganar. Ambos se pararon en el centro del skatepark, rodeados por una multitud creciente.
—Muy bien, Max. —dijo Bradley—. El primer desafío es una carrera de obstáculos en la pista de skate. El primero en completar el circuito gana.
Max asintió, sin dejar que la confianza de Bradley lo intimidara.
—Que comience el espectáculo —dijo Max, colocándose en la línea de salida.
Ambos se prepararon, y al sonar el silbato, se lanzaron a la pista. La multitud vitoreaba y animaba mientras Max y Bradley agarraban velocidad para acabar el circuito en menor tiempo, superando los obstáculos con demasiada facilidad.
La carrera fue intensa, con ambos rivales manteniéndose codo a codo. Max logró sacar una ligera ventaja en la última curva, pero Bradley no se quedó atrás. La competencia estaba tan reñida que al cruzar la línea de meta, apenas había un margen de diferencia entre ellos.
—¡Max gana por una nariz! —gritó PJ, levantando el brazo de su amigo en señal de victoria.
La multitud aplaudió, mientras Bradley se detenía, respirando con dificultad. Haber sido vencido por un novato una vez, ya había sido una desgracia, ahora que lo había vencido dos veces, no lo estaba logrando soportar de buena manera.
—También con la nariz que tiene, como no va a ganar por una nariz —murmuró Bradley, intentando no explotar en ira.
—Al menos no tengo esos dientes gigantes —respondió Max, con una clara burla.
—Al menos los tengo todos dentro de mi boca —lo encaró Bradley.
—Y tus dientes no serán lo único que tengas dentro de tu boca si no te callas.
—¡Chicos, por favor, paren! —PJ intenta separarlos, al ver que estaban por llegar a los golpes— ¡Fue un juego justo y no hay razón para pelear! Dense la mano y arreglemos esto rápido.
Max extiende su mano hacia Bradley que duda unos instantes antes de estrecharla.
—Bien jugado, Max. Aún no cantes victoria, hay varios retos por cumplir.
—Y estoy seguro que ganaré todos.
—Ya lo veremos.
...
Mientras tanto, en otra parte del campus, Roxanne se encontraba en la cafetería con algunas de sus amigas, comentando sobre la competencia.
—¿Escucharon sobre la carrera de Max y Bradley? —preguntó una de las chicas.
—Sí, Max ganó por poco. —respondió Roxanne, sonriendo—. Siempre ha sido muy competitivo.
—¿Vas a la fiesta de esta noche? —preguntó otra amiga.
—Sí, tengo las esperanzas de que Max también vaya. —respondió Roxanne, su mente divagando hacia Max.
—Me parece que alguien está enamorada.
—No estoy enamorada, solo me emociona verme de nuevo con él luego de un año sin contacto. Eso es todo. Seguro ya conoció chicas más lindas.
...
Esa noche, Max y sus amigos decidieron relajarse después de la intensa competencia. Se dirigieron a una fiesta organizada por una de las fraternidades en el campus.
—Nos merecemos un poco de diversión después de hoy —dijo Bob, levantando su vaso.
—Estoy de acuerdo —respondió Max, sonriendo—. Ya tengo varias ideas para el próximo desafío.
La fiesta estaba en pleno apogeo cuando llegaron. Max se movía entre la multitud, saludando a conocidos y disfrutando del ambiente. Fue entonces cuando vio a Roxanne, hablando con un grupo de chicas cerca de la pista de baile.
—Hola, Roxanne —la saludó Max, acercándose.
—¡Max! Felicitaciones por la victoria de hoy —respondió ella, sonriendo.
—Gracias. Fue una competencia muy pareja —dijo Max, sintiendo una extraña mezcla de nervios y emoción al hablar con ella.
—Parece que últimamente estás siendo el centro de atención —dijo Roxanne, bromeando.
—Bueno, trato de mantenerme ocupado —Max respondió, riendo.
Mientras tanto, Bradley también había decidido asistir a la fiesta, aunque con menos entusiasmo. Se mantenía alejado de la multitud, observando desde una esquina. Cuando vio a Max y Roxanne hablando, sintió una punzada de algo que no quería admitir como celos.
—Hey, Bradley —Bobby se acercó, con una sonrisa amistosa—. Buena carrera hoy.
—Gracias —respondió Bradley, tratando de mantener la compostura. No tenía la intención de agradar a ninguno de los amiguitos raros de Max.
—Siempre creí que el rey de los Juegos Extremos era demasiado bueno —dijo Bobby—. Me sorprendió darme cuenta que no era así.
Bradley asintió, aunque su mente estaba en otra parte y no había escuchado nada de lo que le decía. Observó a Max y Roxanne por un momento más antes de decidir que era mejor irse. No podía soportar estar allí y ver cómo Max parecía tener todo lo que él había perdido.
Max, por su parte, no se percató de la partida de Bradley. Estaba demasiado ocupado disfrutando de la noche, sin saber que las próximas semanas estarían llenas de desafíos y sorpresas que pondrían a prueba no solo sus habilidades, sino también su carácter.
Mientras la noche avanzaba, Max y Roxanne seguían conversando, riendo y recordando viejos tiempos. Aunque ambos sabían que las cosas habían cambiado desde la secundaria, había una familiaridad reconfortante en su compañía.
—Ha sido una noche interesante —dijo Roxanne, mirando a Max.
—Y apenas comienza —respondió Max, sonriendo.
—Max, yo... quería decirte que estoy muy contenta de habernos reencontrado.
—Yo también lo estoy, Roxanne.
—Puede que solo haya pasado un año desde que terminamos, pero... —Roxanne empieza a jugar con su cabello de forma nerviosa— me preguntaba sí... ¿ya conociste a alguien más?
—¿Te refieres si conocí a otra chica?
—Sí...
—Pues no. Creo que aún no encuentro a ninguna chica que me complemente.
El brillo de los ojos de Roxanne se pierden al escuchar eso. ¿Acaso había dicho ninguna chica? ¿Eso la incluía?
—¿Y un chico?
Max se ríe al escuchar eso.
—¿Ahora de qué estás hablando, Roxanne? Creo que has bebido demasiado. Te acompaño hasta tu habitación.
...
Al día siguiente, Max y sus amigos se encontraron en su habitual lugar de reunión, listos para planificar la semana.
—¿Listos para saber el próximo desafío? —pregunta Max a sus amigos, emocionado por contarles su plan brillante.

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Inertia [Maxley]
Fiksi PenggemarDespués de derrotar a los Gammas, Max vuelve a la universidad para cursar su segundo año, aún sumergido en el mundo del skateboarding, aunque también más interesado por la vida universitaria, los amigos, las fiestas y los amores. Por otro lado, Bra...