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Después de tres meses intensos de grabación, el rodaje de "Zombies 4" llegó a su fin. El equipo había trabajado arduamente, formando vínculos y creando recuerdos inolvidables. Las despedidas eran inevitables y, aunque todos sabían que ese momento llegaría, no podían evitar sentir una mezcla de tristeza y gratitud.
La última noche, el equipo organizó una fiesta de despedida en el restaurante más famoso del lugar. El ambiente era festivo, pero también cargado de una melancolía silenciosa. Todos compartían anécdotas y reían, disfrutando de los últimos momentos juntos.
Malachi estaba de pie junto a la mesa de bebidas, observando a sus compañeros de reparto. Vio a Madelaine riendo con algunos miembros del equipo y sintió una punzada en el corazón. Había disfrutado cada momento con ella durante estos meses y sabía que la extrañaría profundamente.
Finalmente, llegó el momento de las despedidas. La fiesta empezó a diluirse y la gente se dirigió a sus habitaciones para empacar y prepararse para los vuelos del día siguiente. Malachi salió a la terraza del lugar, buscando un poco de aire fresco y tiempo para reflexionar.
Mientras estaba allí, Madelaine apareció, envuelta en una chaqueta para protegerse del aire fresco de la noche. -Hola, Malachi-dijo suavemente, acercándose a él.
-Hola, Mads-respondió él, sonriendo. -¿Te estás despidiendo de todos?-
Ella asintió, su expresión reflejando la mezcla de emociones que sentía. -Sí, ha sido una noche agridulce. Voy a extrañar a todos- mostró una amplia sonrisa mientras extendía sus brazos en busca de un albarazos por parte del chico.
Malachi sintió un nudo en la garganta y sin pensarlo mucho, correspondió al abrazo.-Yo también los voy a extrañar a todos, Mads. Estos tres meses han sido increíbles gracias a todos-
Se quedaron en silencio por un momento, contemplando las luces de la ciudad que brillaban a lo lejos. Finalmente, Madelaine rompió el silencio. -Sabes, nunca imaginé que haría amigos tan especiales durante este rodaje. Me alegra que nos hayamos conocido y lograr arreglar nuestras diferencias- ambos chicos seguían aferrados el uno al otro mirando hacia la gran ciudad.
Malachi asintió. -Yo tampoco. Tú has hecho todo esto mucho mejor de lo que podría haber imaginado. Me hubiera gustado lograr entablar la buena relación desde un principio y no tan tarde como lo hice-
Madelaine subió la cabeza un poco, sus ojos buscando los de Malachi. -Quiero que sepas que, sin importar dónde estemos, siempre estaré aquí para ti. Y también me hubiera gustado mejorar la relación antes pero supongo que por algo suceden las cosas.-
Malachi la miró, sus sentimientos a flor de piel. -Lo mismo digo, Mads. No importa la distancia-
Se quedaron allí, en la terraza, saboreando los últimos momentos de tranquilidad antes de que sus caminos se separaran. Finalmente, Malachi extendió la mano y Madelaine la tomó, ambos sintiendo la conexión que habían construido.
-Prométeme que mantendremos el contacto- dijo Madelaine, sus ojos llenos de sinceridad.
-Lo prometo-respondió Malachi sin dudar. -No quiero perder esta amistad, Mads-
Ella sonrió y asintió. -Ni yo. Cuidate, Malachi.-
-Tú también, Madelaine-
Volvieron al abrazo, un abrazo largo y reconfortante que encapsulaba todos los momentos y sentimientos compartidos. Cuando finalmente se separaron, ambos sabían que, aunque el rodaje había terminado, su vínculo seguiría creciendo, sin importar la distancia.
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