A mí, nadie me elige los amantes.

50 6 2
                                    

Creo que obtuve yo más placer que él. Volvería a hacerlo. Y en ese instante, que yo miraba el sobre amarillo, han llamado al portero. No he abierto, he salido con una camiseta mía larga solo y allí,en la cancela de mi casa, había un hombre enorme de pie.

He abierto y me he sentado en el banco de piedra que hay bajo la higuera. Él, se ha sentado delante de mí.

-. Tania, necesitaba hablar contigo.

-. No hace falta. Los dos sabemos lo que ha pasado esta noche. Si tienes alguna reclamación que hacer por los servicios, es tarde.

-. Por favor, te lo suplico. No me trates así. Quiero hablar de ti y de mí.

-. Javi, lo dejaste claro. No puede haber un tú y yo. Lo de anoche fue un pacto, un contrato.

-. No puedo pensar así. Lo he intentado. Tú no eres de ellas.

-. ¿No estuve a la altura?. ¿No supe darte placer?.

-. Estoy agotado. Nunca había disfrutado tanto con una mujer, en una sola noche.

-. Entonces, todo salió bien. No le des más vueltas. Me elegiste, me contrataste... Ambos hemos cumplido y te aviso, que ambos estamos satisfechos. He gozado mucho siendo tu puta por una noche.

-. En ningún momento te he tratado como tal...

-. Pues entonces, el que no ha cumplido, has sido tú. Yo quería que me trataras así, precisamente.

-. No podría tratarte así, jamás. No podría porque te quiero.

-. Precisamente se me ocurrió hacer lo que hice, para que te sintieras libre de tratarme de esa forma y que pudieras no vincularte conmigo. Esa era tu excusa barata para tratarme como me estabas tratando...

-. Tania, no seas tan dura conmigo...

-. Javi, no lo soy. Era imposible nada entre tú y yo. Ofreciéndome a ser tu puta, me has follado sin problemas....

-. Pues no ha funcionado. Quiero más.

-. Cuidado, Javi. A mí, no vengas a joderme más la vida. Tengo muy claro, que no quieres una mujer en tu vida. Ya tienes a Carmen, y sé que toda tu vida gira en torno a sentirte libre de cargas.

-. Quiero probar a sentirme más normal, a tu lado. Nunca había conocido a una mujer que me atraiga tanto a su mundo. Quiero hacerte una proposición.

-. Si no voy a sentirme cómoda, con el rol que me toque, no lo haré ni por dinero.

-. Quiero que te sientas cómoda, pero también que partícipes. Quiero una velada normal, como una pareja cualquiera.

-. Quieres otra farsa para sentirte cómodo, pero siguiendo haciendo lo que quieras conmigo. ¿Es eso?.

-. No, Tania. Quiero intentar algo que nunca he podido hacer. Tener una relación sincera con una mujer que me atrae. Quiero apostar por esto.

-. ¿En qué macabro plan estás pensando?.

-. No es macabro. Quiero salir contigo como dos personas normales. Tener una cita como podrían tener dos personas cualesquiera, que se atraen y se desean. Dedicarnos las tardes de los miércoles para quedar, para salir a cenar, para ir al cine.

-. Para follar...

-. Como cualquier pareja que se está conociendo hoy en día, sí. Para follar si a los dos nos aparece hacerlo, claro que sí. Sin condiciones ni pactos.

-. Yo sí que tengo una condición. Ninguna de las parejas que conozco, ha fingido no ser quien era, antes de empezar a tener citas. Podría quedar un día a la semana contigo, pero no los miércoles. De hacerlo te exigiría que sigas con tu vida mientras nos conocemos. Con todo.

El señor Mal. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora