Capitulo 18. Obstaculos.

91 16 84
                                    

En la vida siempre habrán obstáculos, pues bien se dice que lo bueno nunca es fácil de conseguir, que nada valioso es sencillo. Nada importante es fácil.
Los obstáculos existirán siempre, baches en la carretera de la vida, manchas en las obras de la gente.
Vale la pena atravesar aquellos obstáculos cuando la meta es tan ansiada...¿no?

POV Lloyd.

Había pasado un mes desde la partida de cierta pelirroja, un mes exacto desde que esta le había confesado sus sentimientos a Kai y medio desde su hospitalización.
Desde aquel día había empezado a pasar más tiempo con él, muchísimo más, demasiado. De cierta manera, Lloyd sabía que eran algo así como la cura del otro: el ayudaba a Kai a superar la partida de la pelirroja y Kai,sin saberlo, lo apoyaba a sobrellevar aquel duro momento que la enfermedad le estaba haciendo pasar.

Se necesitaban mutuamente...

-Deberíamos ir a la fiesta de mañana.-sugirió Jay.

Las fiestas de verano habían empezado desde hacía ya un par de semanas, y cada fin de semana alguien tiraba su casa por la ventana. Esto lo sabía gracias a que su página principal de Instagram estaba repleta de historias de compañeros tomando o simplemente pasando el rato en alguna borrachera.

-¿Cuál?-preguntó el rubio, sin apartar la mirada de su teléfono, moviendo velozmente los dedos, estaba a punto de ganar aquella partida.

-Dios Lloyd, nunca te enteras de nada.-reprochó el pelirrojo.

-No me entero de lo que no me interesa.-respondió, callando al pecoso. Nya disimuló su risilla y Kai le lanzó un guiño en señal de felicitación.

-El viernes habrá una fiesta organizada por Karlof, un compañero nuestro.-intervino la azabache.- será en su casa de playa.

Al rubio le llamó la atención la idea, sobre todo porque sabía que aquella salida animaría al castaño.

-¿Vamos?-preguntó Lloyd a Kai, el cual ya lo estaba observando con ojos expectantes, y al cruzar miradas sonrió, a manera de afirmación.- entonces iremos.

-¡Bien!-exclamó Cole, el cual se encontraba sentado en el sofá rodeando con su brazo a Seliel. Está sonrió ante la positiva del moreno.

-Bueno, ¿entonces nos ponemos de acuerdo de cómo ir o nos vemos allá? -Zane siempre era precavido y hacía preguntas con sentido.

-Vámonos todos juntos, nos dividimos entre tu carro y el mío.-sonrió Kai. A todos les gustó la idea y nadie rechistó.


Como era de costumbre, el rubio y el castaño tuvieron una rápido escapada hacia aquellas crepas que Kai le invitaba siempre que se sentía triste o estaba enfermo.
Al ser un sitio bastante concurrido por los de la universidad, puesto que el campus estaba junto a esta, no era extraño encontrarse compañeros de clase devorando alguno de aquellos manjares. Aunque la persona que menos esperaban ver aquel día fue la que apareció: Harumi.

Estaba sentada con una chica cuyo semblante se le hacía familiar a Lloyd, solo que no recordaba de dónde, hasta que la vio de frente...era Camille, una chica que habría pasado inadvertida para él de no haber sido por su peculiar cabello morado.
Cayó en cuenta de lo que aquella reunión de ex alumnas podría significar, y se sintió como un balde de agua fría...¿y si hablaban de él?
La peliblanca lo divisó y le lanzó una mirada maliciosa, por supuesto que hablaban de él.
Kai notó su incomodidad y lo rodeó con su brazo, apegándolo a él.

El viento que mece nuestras almas [Greenflame]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora