Swan Lake {Hyunlix}

Parte 20

Anteriormente...

Sí, esto era lo que Min-ho decía sobre estar enamorado de alguien, entonces sí, yo estaba enamorado de Felix. Y no me arrepentía de eso.

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Regresaba a mi casa luego de un día entero de ausencia. Completo silencio y oscuridad fue lo que me recibió. Me preguntaba a dónde se había metido Min-ho, pero era tan predecible que me podía imaginar dónde estaba. En casa de sus padres o en una cita con Hannie. Fui hasta mi cuarto, saqué mi libreta y lápiz y los dejé en mi mesa. Dejé el bolso en un perchero que tenía y me fui directo hasta la cocina para calentar agua porque necesitaba darme un largo baño. Realmente lo necesitaba.

Después de unos minutos, el agua había empezado a hervir, por lo que fui rápidamente a llenar la bañera con agua fría para que al final quedara agua tibia. Cerré el grifo y regresé a la cocina por la olla grande para echarla en el agua de la bañera. Unos segundos después de echar el agua hirviendo en la bañera, la removí con mi mano para que se integrara con el resto del agua. Me quité las prendas de ropa que tenía y me metí en la bañera, colocando mi cabeza en el borde. Sentía como el agua tibia abrazaba mi cuerpo, ocasionándome un poco de sueño, como si de una manta se tratase. Después de echarme jabón en cada rincón de mi cuerpo, mi mente empezó a recordar todo lo que había pasado los últimos dos días. Realmente no esperaba que durara tanto en ese bosque, pero realmente era feliz cuando estaba con "Félix..." Sonreí como un bobo y metí mi cabeza en el agua que se empezaba a enfriar. Era la primera vez que decía su nombre desde que había admitido que me gustaba. Es que ocupaba una forma de despejar mi mente de él.

Salí bruscamente del agua, provocando que se esparciera un poco por el suelo del baño. Sacudí mi cabeza ocasionando que varios mechones de mi cabello se pegaran a mi frente. Puse mis manos a ambos lados de mi cuello entrelazándolas por detrás. Con solo decir su nombre mi corazón había empezado a dar fuertes palpitaciones en mi pecho. Volví a sonreír nuevamente.

Habían pasado una semana y media por lo que cada vez estaba más cerca el tan esperado baile; o al menos así era para Min-ho. Después de que el hermano mayor de Jisung los apoyara y les diera un poco de flexibilidad en sus "citas" cuando él se encontrara en el reino. Yo pasaba mis días pintando o salía a correr en las mañanas, seguían un poco frías porque estábamos a inicios de primavera aún. Faltaban solo pocos días para mi cumpleaños número veintidós y calzaba mágicamente con el baile. Fantástico ¿no?

Todas las tardes del martes y los jueves Min-ho le había pedido ayuda a su co-protagonista para que me enseñara a bailar. Ya que quedaban pocos días para el baile. "Hyunjin, me volviste a majar. ¿Acaso no sabes que los pies para las bailarinas es lo más valioso?"

"Perdón, Yeji". Ya había perdido la cuenta de la cantidad de veces que la había majado por error.

"Iniciemos otra vez, Min-ho marca el ritmo". Hyung empezó a marcar el ritmo con sus palmas para que pudiéramos seguir. Agarré su mano y mi otra mano se posicionó un poco más arriba de su cintura. Debía aprender a bailar si no quería quedar tan mal en el baile. Aunque no sé si este conocimiento lo usaría, pero debía estar preparado para cualquier cosa.

"Hyunjin está mejorando, ¿no es así, Yeji?" Dijo Min-ho al terminar de marcar el ritmo.

"Sí, creo que solo dos días más y no necesitará venir más. No quedó como un profesional, pero gracias a su propio esfuerzo quedará como alguien decente".

"Terminemos por hoy, todos necesitamos un descanso".

"Gracias, Hyung, y también gracias, Yeji". Me separé de ella y fui al lado de mi amigo.

"Fue un placer, Hyunjin. Hubieras sido un buen bailarín si te lo hubieran inculcado desde pequeñito", me dijo Yeji mientras se retiraba el sustituto de falda que usaba para ensayar.