CAPÍTULO 28 "SOLTAR"

4 1 0
                                    

¿Alguna vez te has sentido mal por soltar a la persona que te ha hecho tanto daño? En realidad no sé qué siento, siento tanto amor, tanta ternura y tantas ganas de intentar las miles posibilidades que transcurren en mi cabeza, que a veces no sé qué siento. Siento tanto odio, tanto terror, tanto miedo por seguir lastimado y porque esa persona me siga haciendo tanto daño, que a veces no sé lo que siento. Es tan difícil soltar una persona que te hace tanto daño cuando inclusive tú sabes que te ha hecho daño, que te ha hecho sufrir en ocasiones anteriores y siempre lo has perdonado, que te ha puesto por el suelo, sin embargo siempre lo has perdonado, pensando en que tal vez cambiará, pensando en que tal vez la nueva oportunidad que le das sea la correcta, sea la correcta para empezar algo que siempre has querido, para continuar una historia que jamás se ha empezado a escribir, al menos no de la manera que quisiera, pero es conveniente cuestionarme yo mismo y preguntarme ¿qué siento?, ¿qué siento en este momento?, ¿qué siento por él?, ¿qué siento por mí?, ¿qué siento por esto?.

Y es que al cuestionarme todas estas preguntas no tengo respuestas, la única respuesta que transita por mi cabeza es un profundo sentimiento de confusión, una confusión que se quiere aclarar pues una parte de mí dice, que no se merece otra oportunidad, es momento de que sigas adelante y empieces a amarte a ti más de lo que lo amas a él, pero la otra parte de mí dice, inténtalo, hazlo feliz, intenta que sea feliz sobre todas las cosas, en conclusión ese siempre ha sido mi sueño o mi propósito con el chico de suéter azul, pero ¿qué debo hacer?, otra pregunta se formuló en mi cabeza y como esta miles más.

¿Cómo suelto a la persona que amo?, pero también es la persona que me ha hecho daño, pues simplemente siento que él no sabe lo que quiere y se ha encargado de descontrolar mi vida, en una, dos, tres y en las oportunidades que ha tenido. Oportunidades que gafamente yo le he dado, pero no me arrepiento, no me arrepiento, pues está mal arrepentirse de algo que hiciste con el corazón,  si realmente lo hiciste con el corazón no debe existir el arrepentimiento al contrario debiste haber disfrutado el momento como el último segundo de tu vida y así recordarlo por más daño que te haya hecho.

Algún día espero solamente soltar esto, esto que ha hecho tanto daño para mi ser, pero también espero verlo en la calle siendo feliz, feliz como siempre he querido, feliz con una persona que realmente lo ame y lo haga sentir como yo alguna vez quise, y la persona nueva o él mismo cambie su forma de amar, sin cambiarlo a él, pues dentro de tantos defectos él siempre será perfecto. Que cambie su forma inesperada de ver la vida. Pero definitivamente qué ridículo soy ¿por qué quiero que sea feliz? y no puedo pensar en ser feliz yo, simplemente debería dejar de pensar en los demás y aprender a vivir yo, vivir, algo que todo el mundo pide que haga. Y es que lo hago pero a mi manera, este año soy feliz, feliz dentro de tantas cosas, inclusive dentro del desamor, que creo que este año será así, pero no me afectará, no me afectará ni esto, ni nada, por mil cosas, por mil motivos seré feliz.

Chico de suéter azul, me duele soltarte, me duele soltar esto que pensé que duraría para siempre, esto que intenté que fuera la mejor historia de mi vida. La mejor historia del mundo, me duele soltar esto que con tanta ilusión quise que funcionara. Jamás he querido soltarte pero debo aprender a ser yo, debo dejarte ir para aprender a soltarte y que ambos seamos felices.

Siempre quise que esto diera resultado, que nuestra historia nunca tuviera un punto y aparte, que continuáramos juntos por las mil lunas que quedarán en el mundo, que fueran ellas las únicas testigos de nuestro amor. Que le demostráramos al mundo que podíamos con todo, incluso cuando nadie puede con todo. Mi último intento fue entenderte, entenderte como quisiera que me entendieras a mí, entenderte como siempre quisiste que alguien te entendiera, entenderte de la forma que la luna entiende al sol. A veces el último intento nunca da buenos resultados, nosotros somos voz hablante de eso, pero te esperaré como la luna espera al sol en cada eclipse, esperando unir sus campos opuestos, así te esperaré, te esperaré con un último intento y este con la esperanza de que tal vez no sea el último intento.

Ya quiero que llegue el día donde no vuelva a sentir nada por ti, dónde te vea en la calle y seas una persona más, no me den ansiosos deseos de abrazarte y revivir esa historia que algún día tuvimos. Ya quiero dejar algún día todos estos sentimientos hacia ti, que no me importe donde estás, que has hecho, ni como va tu día, que no me importes tú.  Más que un querer es algo de necesidad, necesito vivir la vida sin pensar en ti, sin revivir en cada mirada o suspiro, lo que ambos vivimos. Algún día, te veré en las avenidas que juntos transitamos y no me traerá recuerdos, ni pensaré en seguir la historia que ambos tuvimos. Algún día, esto pasará y reiré al recordarte, reiré por los buenos recuerdos y por todo lo que he pasado.

El recuerdo más bonito que tengo contigo fue ver ese último atardecer de febrero. Y sabes, espero ansioso el próximo febrero, para ver el recuerdo de un viejo atardecer.....

¿Amor o Ilusión? Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora