Todos alguna vez hemos pasado por un momento difícil, eso que llamamos, depresión, la depresión es algo que ha estado más presente en la sociedad actual, se ha apoderado de la adolescencia causando grandes e irreparables desastres, dejando a tantos en el hoyo, sin saber cómo salir, un hoyo interminable, sin fondo, en el cual caes, caes y caes, y jamás llegas a un punto. Te sientes en el limbo sin saber hacia dónde vas, todo está negro, es una oscuridad total, donde jamás ves la luz, pero está en nosotros aprender a crear una linterna para alumbrar el camino de la salida, está en nosotros aprender a reparar tantos daños y aprender a buscar otra alternativa de salida del hueco emocional. Aunque nos hagamos las personas más duras y fuertes del mundo, siempre necesitamos un apoyo, una ayuda de cualquier amistad, que te haga sentir que puedes con todo. Una palabra de aliento te ayuda a reanimar todas las esperanzas perdidas.
La desaparición y aparición de Yilberth, me estaba comiendo el cerebro preguntas sin respuestas, que se formulaban a diario en mi cabeza, esto me llevaba a una situación terrible, el momento más difícil de toda mi vida, esa depresión que jamás quería volver a sentir. Pues ya lo había vivido con Argenis y tener que volver a vivirlo era algo que sin duda no quería y menos por un amor. Poco a poco fui saliendo del hoyo donde estaba y aceptando que quería disfrutar el momento sin pensar en que Yilberth se podría ir nuevamente. Y así fue, me dediqué a disfrutar cada momento, cada mensaje, cada palabra, cada segundo, cada minuto, cada hora, cada día y cada semana.
También estuve dejando de pensar tanto en Yilberth y en el hecho de que se podría ir, porque nuevamente empezamos a frecuentar en nuestras conversaciones y me mantuve ocupado todo lo que fue en marzo y abril por cuestiones del liceo, pues mi profesora de GHC, me había ofrecido ir a un congreso de historia, ella sabía que me encantaba muchísimo la historia y me ofreció presentar un monólogo en ese congreso. Yo estaba encantado por la oportunidad que mi profesora me ofrecía, sin duda era algo que me encantaba y me gustaba al máximo, me preparé muchísimo con todas las orientaciones de la profesora y con cada cosa que fui investigando sobre el tema en relación al congreso y así fue, cuando me tocó presentar el monólogo lo hice con la mayor satisfacción, con la mayor energía y el mejor de los ánimos, estaba haciendo lo que amaba, combinando el teatro con la historia y los aprendizajes de la vida.
Llegó Abril, tenía muchísimo tiempo sin ver a yilberth, la verdad quería a alguien más, necesitaba conocer gente nueva, ya quería un nuevo amor y no seguir destruyendo el amor que le tenía a Yilberth, nunca nos veíamos y eso no me gustaba, necesitaba conocer a alguien más y dejar a Yilberth tranquilo. Y aquí es donde aparece él, lo más despistado que he tenido, un chico muy lindo, blanco de piel, cabello muy bien arreglado, muy educado, siempre arreglado y típico chico guapo que parecía Hetero, Yosber, se preguntarán porque digo que es lo más despistado que he tenido, bueno, parecía que vivía en las nubes, muy poco le gustaba responder, siempre se le olvidaba, él era un flaco muy lindo, trabajador, le gustaba practicar algunos deportes e ir frecuentemente al gimnasio. Lo conocí por Facebook, con el paso de los días comenzamos a hablar, y luego nos agregamos en WhatsApp, él tenía mi edad. Rápidamente comenzamos a chatear, y cuadramos para salir.
—Ya son las 3:00 pm, ¿Ya vienes?— preguntó Yosber.
—La verdad ya llegué— respondí.
—¿Cómo que ya llegaste?, tenías que avisarme cuando vinieras en camino, para esperarte en la parada, y darte la mano cuando te bajarás del carro, como si fueras un príncipe, y poder recibirte— dijo él.
—Tan lindo, bueno no sabía, ya llegué, ando caminando— respondí.
—Claro, yo me vine guapo y elegante hoy solo para ti— respondió.
—Tan lindo— respondí.
—Bueno ya voy bajando para la parada, espérame ahí— dijo Yosber.Se sentía extraño que alguien más que no fuese el chico de los sentimientos lindos, me tratara bonito, Yosber estaba comenzando de la mejor manera. La verdad él había organizado la salida, no quería que yo supiera que íbamos hacer, todo sería una sorpresa. La salida con Yosber fue la mejor, hasta un cierto punto, fuimos a una plaza a ver el mar, caminamos y nos compramos algunas cosas. Luego nuestro día perfecto, se vio interrumpido por una llamada de su mejor amiga, quién le pedía que fuera a su casa urgentemente para que la acompalara, él me preguntó si yo tenía algún problema de que fuéramos hasta donde estaba su mejor amiga y yo por ser amable le dije que sí podríamos ir, aunque la verdad es que no quería ir, no me gusta mucho conocer tanta gente nueva, ni socializar con gente. Fuimos hasta donde su mejor amiga, Yosber nos presentó y luego salimos a caminar, un rato más tarde yo me fui, no quería estar con tanta gente.
Con Yosber las cosas no eran como yo las queria, y es que siempre he sido el chiquito consentido y caprichoso, que se hacen las cosas como él dice, ese siempre he sido yo. Yosber me trataba muy lindo, pero no mostraba interés, olvidaba responder mis mensajes, no salíamos mucho y no demostraba gran interés ni iniciativa. Yo no sabía si solo alejarme de él, o intentar algo más.
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¿Amor o Ilusión? Parte 2
Novela Juvenil¿Alguna vez te has enamorado de verdad? yo sí, me enamoré dos veces, de las personas que menos creí, uno dulce, tan dulce como el azúcar, el chico de sentimientos lindos. Otro un tanto amargo, pero de buenos sentimientos, el chico de suéter azul. Si...