CAPÍTULO 11 "9 de JULIO"

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¿Cómo me siento?, la pregunta que siempre resuena en mi cabeza, pero a la que sin duda jamás le encuentro una respuesta clara, pues algunos días me siento bien, otros no tan bien, y muchos me siento como la peor persona del mundo. Pero así me han hecho sentir, siempre he creído en la lealtad y en la fidelidad de las personas, pero la vida se ha encargado de demostrarme que realmente nadie es leal a ti, y que cuando necesitas realmente de alguien, todos te dejan solo. Solo en el vil abismo de la oscuridad, del cual sin duda es difícil salir, ese abismo que se presenta como la sombra más tenebrosa y siniestra, que sin duda espera cualquier momento para arrastrarse hasta su oscuridad para que te hagas parte de ella y nunca salgas del profundo hoyo oscuro y tenebroso. Tantas veces me he sentido como la persona más repugnante del planeta, a la que nadie quiere y que sin duda nadie espera nada de mi, me he sentido como si no contará con nadie, como si jamás tuviera a alguien a mi alrededor. Solo vinimos a este mundo y solo nos iremos.

Esa desaparición de Yilberth me había dejado en el limbo, sin saber que hacer, sin saber que decir, sin saber que sentir, solo sabía que lo extrañaba profundamente, tenía la ilusión de que me escribiera de un número de cualquiera de sus amigos, pues él iba al liceo, pensé que tal vez podía pedirle un mensaje a cualquiera y me escribiría, pero esto nunca paso, nunca se intentó comunicar conmigo, ni se conecto en Facebook.

19 de abril, este día me dolió muchísimo no poder hablar con él, pues teníamos tantos planes para este día, y el destino no, nos dió chance de cumplirlos, ¿la salida?, ¿ser novios?, ¿qué había pasado con todo eso?. Tantas veces quería gritar, llorar y solo verlo, cada minuto del día extrañaba sus mensajes, lo extrañaba a él. Le pedía al destino, encontarmelo para verlo por última vez y después de eso olvidaría todos los sentimientos que tenía hacia él.

¿Qué sentía por él?, amor, sin duda eso, me había enamorado completamente de el chico de sentimientos lindos, era un amor que no había sentido ante por nadie, nisiquiera en el primer amor sentí algo así, y con Yilberth entendí que el amor puede ser como tú lo has soñado.

¿Aún lo extrañas?, me preguntaban, y mi respuesta siempre fue sí, si lo extraño y lo extrañaré, el significó todo en mí, fue el amigo incondicional que jamás he tenido, ese que escuchaba cada locura que se me ocurrirá y nunca me juzgaba. Fue la persona que siempre entendió cada circunstancia que me ocurría, cada cambio de humor, cada desánimo y cada molestia, y jamás se alejó. Fue mi compañero de amor, sin duda así titulare cualquier historia donde hablé exclusivamente de él, pues lamentablemente no llegó a ser mi novio.

Ya habían pasado tres meses desde la última vez que hablé con Yilberth. Ya era 06 de julio, casi pasaba al quinto año de educación secundaria.
—Hey hablemos de Yilberth— dijo Yunna.
—¿Qué pasó con él?— pregunté.
—¿Aún te gusta?, ¿Qué sientes por él?— preguntó.
—Yilberth siempre tendrá un lugar en mi corazón, pero no sé, creo que ya lo he olvidado, pues me duele que él jamás buscó la manera de contactarme, así que prefiero dejarlo atras y seguir mi vida— respondí.
—Es así, él nunca te ha buscado, nunca ha intentado nada, y no es que no tenga como, él tiene amigos, le pudiera pedir a cualquiera para escribirte— comentó Yunna.
—Yo pienso lo mismo— dije.

Y es que sí, yo pensaba lo mismo, él debió haber buscado las maneras de escribirme, yo lo hubiera hecho, pero simplemente no, se conformó con solo estar alejados, yo intenté hacer las mil cosas para contactarlo pero nada funcionó, incluso le mandé la solicitud a su amiga por Facebook pero nunca la aceptó, iba casi todos los días a caminar por donde su mamá trabajaba a ver si lo veía a él pero jamás lo vi, pasaba por donde estudiaba para encontrarlo pero jamás lo encontré, yo estaba intentando hacer de todo para conseguirlo pero él solamente dejo que todo pasara y se conformó con estar así, cada quien por su lado. Yo debía seguir mi vida, no podía aferrarme a un recuerdo que sin duda me estaba haciendo daño, era el recuerdo más bonito que tenía pero estar separado de él, me hacía el peor de los daños.

¿Amor o Ilusión? Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora