CAPÍTULO 3O "SER YO"

9 1 0
                                    

Comencé a dejar de dejar que me enamoraran para dedicarme a enamorarte a ti, impedí los tratos lindos de otra persona para dedicarme a tus tratos rotos y quebrantados, ya no fui feliz con quien realmente me daba la felicidad por dedicarme a darte la felicidad a ti, dejé a un lado al chico que realmente se dedicaba día y noche a que yo estuviera bien por simplemente dedicarme a ti, a un chico roto que se dedica a romper todo lo que está a su paso. Dejé de ser yo por convertirme en tu sombra. Dejé de ser yo, por seguirte a ti.

¿Soy el malo?, un día después de dejar de hablar con el chico de suéter azul, un nuevo nombre empezó a resonar en mi corazón, Yoendris, un niño de 15 años, sin duda este niño me hizo sentir en tan poco tiempo lo que a muchos le ha tardado meses en hacerme sentir, logró que por algunos días olvidara al chico de suéter azul y se concentró en hacerme feliz con cada minucioso y delicado mensaje de cariño, él un chico menor que yo, estudiante aún de secundaria, pequeño, blanco, de ojos color café y de cabello liso bonito, sin duda lo que amaba de él era su cabello, aunque él me estaba haciendo sentir cosas muy lindas, yo tenía miedo de enamorarme nuevamente, aparte esté nuevo chico, al cuál llamaremos mi mayor ilusión, él era Hetero. Pero en mi mente solo resonaba ese regaño en forma de pregunta, ¿Soy el malo por un día después comenzar a hablar con alguien nuevo?, pero ahora que lo pienso, no, no soy el malo, igual al chico de suéter azul no le importó lo que yo sentía, o si me afectaba su desaparición, yo decidí alejarme de mi mayor ilusión, pues sabía que aún era muy niño para mí y no lo quería confundir, aparte necesitaba estar solo y seguir siendo solamente yo.

Recordar a cada persona que transcurrió mi vida, y pensar en cual fue amor o cuál fue una ilusión, siempre será una idea confusa en mi mente, Jesús, Sneyder, Luis, Argenis, Yilberth, Yosber y Albert. ¿Tal vez todos fueron ilusiones?, ¿tal vez fueron amores?

La ilusión es como una mariposa que revolotea en el estómago, mientras que el amor es un roble centenario que arraiga en lo más profundo del ser. La ilusión es efímera, pero el amor es eterno. La ilusión puede disfrazarse de amor, y el amor puede confundirse con la ilusión. Pero hay señales: el amor no teme al tiempo ni a las tormentas. Perdura cuando las mariposas se han ido y los castillos se han desmoronado.

En el vaivén de la vida, cada uno elige su camino. Algunos se aferran a la ilusión, persiguiendo quimeras que se desvanecen con el viento. Otros, valientes y vulnerables, se sumergen en el amor, sabiendo que no siempre será fácil, pero que vale la pena. Así que, ¿Amor o ilusión?, quizás la respuesta está en el latido del corazón, en la mirada que traspasa las máscaras y encuentra la esencia. Porque, al final, lo que importa no es cuántas palabras componen un párrafo, sino cuánto amor cabe en ellas.

Una vez un chico, probablemente mi gran amor, o mi gran desilusión, me dijo "quién te ama, no te cambia" bueno yo pienso lo contrario, quién te ama, te puede cambiar para bien, te puede hacer crecer como persona, siempre y cuando respete tus gustos y tus cosas, te respete como persona, y quiera que seas mejor, para que saques lo mejor de ti. Gracias chico de suéter azúl por decirme esto y por de una manera muy extraña aceptar al niño chiquito y consentido que soy.

¿Alguna vez te has enamorado de verdad?, aprendamos a separar la ilusión, el gusto y el enamoramiento, yo sí, me enamoré dos veces, de las personas que menos creí, uno dulce, tan dulce como la azúcar, una azúcar que cambia todos los sabores que tiene el amor y te endulza contangiandote del amor más bonito y sincero. Otro un tanto amargo, pero de buenos sentimientos, sentimientos que siempre escondió pero yo siempre sabré, que dentro de esa armadura de hierro que él pone, se encuentra el chico que sabe amar perfectamente. Yo me he enamorado profundamente del chico de sentimientos lindos y del chico de suéter azul, pero solo uno se quedó grabado en mi corazón.

Yilberth, el chico de los sentimientos lindos, siempre será el único que logró contagiarme del infinito amor que tenía en su corazón, espero que consigas a alguien que te haga tan feliz cómo me hiciste tú a mí, sin duda nunca podremos estar juntos, y hoy lo entiendo, y con palabras me despido de ti. Yosber, fuiste un pequeño momento en mi vida, pero sin duda te quedas grabado en el recuerdo de lo infinito, como ese amigo incondicional. Albert, el chico de suéter azul, esto jamás funcionará pero no me cansaré de intentar, aunque yo me aleje porque tú lo haces, siempre seguiré intentando está aventura que me ha traído malos ratos.

¿Amor o Ilusión? Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora