Sempiterno. - Remus Lupin.

14.

Capítulo 14.

Narra Isabella:

Por primera vez en una semana me atreví a salir de la habitación. Sabía que ambos estaban en una movida para proteger a Harry, lo traerían sano y salvo hasta aquí, hasta que empezara el año escolar.

Decidí salir de mi escondite y preparar la comida, el viejo Kreacher no era de mucha utilidad y Sirius lo liberó para que no nos siguiera insultando.

Mientras preparaba algo rico, no podía dejar de pensar en todo lo que ocurrió, la mirada de esos mortífagos, festejando el tenerme allí, escucharlos hablar de diferentes torturas, como agradezco que Severus me haya sacado antes de que llegaran a más.

- Que rico huele. - Remus me abrazó por detrás mientras depositaba un beso en mi cuello, beso que hizo que mi cuerpo reaccionara. Lo extrañaba.

- Espero que les guste. - admití con nervios.

- Todo lo que proviene de tí es rico... Incluso eso que solo yo pruebo. - dijo en mi oído haciéndome estremecer.

- Dejen el noviazgo para después. - dice Sirius entrando con una sonrisa en su rostro, se nota que ama a Harry.

- Basta Sirius, todo por envidia lo tuyo. - ruedo los ojos.

- Envidia por lo que sea que hayas cocinado. - dice gracioso mientras come de la olla.

- ¡Sirius! - exclamo frustrada.

- Muy rico. - dice asintiendo. - Pondré la mesa y llamaré a los chicos. Pueden noviar un rato.

Aprovecho que sale para abrazar a Remus y besarlo, hacía rato que no probaba sus labios. El beso se tornó agresivo sacando gemidos de mi, que hicieron que me pegara más a su cuerpo.

- Debemos parar. - dijo separándose de mí. -. O te tomaré en la cocina sin importarme quien entre.

- Nunca lo hicimos en un lugar con gente. - comencé a acercarme viendo como traga saliva.

- Basta Isa. - se alejó unos pasos tomando la olla para irse.

Ruedo los ojos. Pero tiene razón.

En la mesa, Harry nos comentaba como sus tíos se fueron, por recomendación de él, ya que todos estarían en peligro. No dejaba de pensar en que estuvo solo todo ese tiempo, ¿Por qué no lo buscaron antes?

- Honestamente tengo mucho sueño. - dice Harry rascando su nuca.

- Igual al padre, todo el día durmiendo. - se burla Sirius.

- Ya déjalo. - exclamo. -. Harry, tu habitación está lista si quieres ir.

- Gracias Isa. - me sonríe y se va.

- Bueno pueden irse a dormir, yo lavo los platos. - afirma seguro.

- ¿Tú sabes lavar? - pregunta Remus burlesco.

- Que alianza en mi contra este matrimonio. - se va con su drama.

Al subir a la habitación, Remus me agarra y me pega a la pared. - Dejamos algo pendiente en la cocina.

- Pensé que no querías. - le digo mientras siento su dureza clavándose en mi.

- ¿Cuándo vas a entender que no te puedo quitar de mi cabeza Isabella? - toma mis labios con intensidad mientras me levanta. Cuando estamos en la cama mientras me quita mi ropa lo detengo.

- Te amo Remus. - se lo confieso, más allá del miedo, porque no quiero que pase algo y me quede sin decirle mis sentimientos.

- Yo también te amo Isa. - vuelve a besarme y me entrego. Extrañé estar así con él.