Pretty Psycho - Alan Beltrán (Yankee)

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El sol de la mañana iluminaba la habitación cuando me desperté, sintiéndome renovada después de un día tan especial con Alan. Me levanté y, después de una rápida ducha, bajé a la cocina donde Roz, quien estaba preparando el desayuno. Su rostro se iluminó al verme.

—¡Ari! —exclamó con una sonrisa amplia— Te he extrañado estos dos días. ¿Cómo te fue? Cuéntamelo todo.

Me senté en la mesa, disfrutando del olor a café recién hecho y tostadas.

—Fue increíble, Roz. Alan me regalo un peluche enorme y me llevó a patinar —dije para después  mostrarle la pulsera en mi muñeca — Y me regalo esto 

Roz la examinó con interés, su expresión suave y cálida.

—Eso suena maravilloso, Ari. Me alegra mucho que estés recuperando recuerdos y creando nuevos momentos especiales —dijo, sirviendo dos tazas de café

—Oye Roz, ¿donde esta Adri y Lukas?

—Lukas está grabando una novela. Me dijo que estarían filmando todo el fin de semana —respondió la pelirroja — Y mi mamá se fue al trabajo

Levanté mi teléfono y le envié un mensaje a Lukas:

"We, Roz me dijo que estás grabando una novela. ¿Dónde estás filmando?"

Mientras esperábamos su respuesta, Roz y yo continuamos hablando, poniéndonos al día sobre nuestras respectivas actividades. Poco después, mi teléfono vibró con una respuesta de Lukas:

"Estoy en Televisa, pero no se si dejen pasar a novias de dinosaurios negros lesbianos, eh"

Le mostré el mensaje a Roz, quien rio

—Lukas y su humor, siempre tan peculiar —dijo Roz, sacudiendo la cabeza con una sonrisa—. Bueno, ¿vas a ir a verlo?

—Sí, creo que sí. Será divertido ver cómo trabaja en el set —respondí, levantándome de la mesa.

Me preparé rápidamente y salí rumbo a los estudios de Televisa. Mientras caminaba, disfruté del aire fresco de la mañana y del bullicio de la ciudad despertando a un nuevo día.

Sin embargo, a medida que avanzaba, comencé a sentir una sensación incómoda. Era como si alguien me estuviera observando. Miré a mi alrededor discretamente, pero no vi a nadie que pareciera fuera de lugar. Traté de sacudir la sensación y continué caminando, aunque no pude evitar sentirme cada vez más alerta. Al ver que un  transporte público se acercaba, me subi rapidamente para sentirme un poco más segura.

Llegué a los estudios y, después de una breve conversación con el guardia de seguridad y mostrar mi identificación, me permitieron entrar.

El set estaba lleno de actividad, con cámaras, luces y personas corriendo de un lado a otro. Busqué a Lukas entre la multitud y lo vi hablando con algunos compañeros de trabajo. Cuando me vio, levantó una mano y me saludó con entusiasmo.

—¡Ari! —gritó, corriendo hacia mí— ¡Qué bueno que pudiste venir!

—¡Lukas! —respondí, abrazándolo— Esto es increíble. ¿Cómo va todo?

—Bastante bien. Ven, te presentaré al equipo —dijo, llevándome a conocer a sus colegas.

Mientras Lukas me mostraba el set y me presentaba a sus compañeros, esa extraña sensación de ser observada volvió. Miré discretamente a mi alrededor, tratando de identificar a alguien que pudiera estar siguiéndome, pero todos parecían ocupados en sus tareas.

Decidí no mencionarlo y me concentré en disfrutar del momento con Lukas. Nos movimos por el set, observando la filmación de varias escenas y conversando sobre su experiencia en la novela. La energía en el set era contagiosa y me encontré disfrutando de la atmósfera creativa.