*Quiero comenzar pidiéndoles mil millones de disculpas. Perdón, borre los 3 capítulos que había subido antes, porque me di cuenta que había errores en la trama y desarrollo, no concordaba con lo dicho en el cap 36. Esto me sucedió porque realmente actualice por presión porque no había subido capitulo, no quería dejar de actualizar pero le puse poca atención y no me fije en lo que estaba haciendo.
Por eso, decidí borrar los capítulos continuar con la historia del cap 36 (si quieres leerlo antes de leer este). Para que recuerdes en qué quedó.
Se que hay muchas preguntas que responder y lo haré. Pero paso a paso para que todo se una en la historia.
Por último, hay tres versiones de lo que pasó en el pasado desde la versión de Roke, Anton y su mamá Donna. (Capítulo 14, 17 y 33) si quieres releerlos para recordarte podes hacerlo. Gracias por leerme, se que estoy lejos de ser una *Joana Marcus o una Flor Salvador, etc. Pero lo que escribo lo hago con el corazón y que vos me leas es un regalo.
No había actualizado porque si estaba pasando días difíciles. Pero aquí te dejo este cap que será largo. Te quiero. Besos. Pam :) gracias por leerme.
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Roke
Suspiro profundamente. Inhalo. 1...2...3...4 exhalo. Repito. Bien Roke, lo estas haciendo bien. Llevas diez minutos así, puedes lograr quince minutos. Inhalo... 1...2...3...4 exhalo lento, así lento.
Repito.
Inha...
Los ojos de mamá me miran con desdén. ¿Porqué no pudiste tener los ojos y el cabello de Kalsey? Te pareces tanto a él que me enferma.
Trago grueso saliva. No se a quien me esta comparando, pero siempre tiene estos momentos donde me mira con repudio. Apenas tengo 11 años, no tengo pechos como Kalsey, no tengo curvas como ella, soy tan delgada y esquelética como dice Lorenzo, su esposo.
Mamá, Kalsy tiene quince años digo con pesar. Mamá viene a mi plantando su rostro a escasos centímetros del mio. Tiene los ojos claros pero no como Kalsey tiene el cabello rubio pero no como el de Kalsey, tiene la piel blanca como Kalsey y tiene cejas rubias como Kalsey.
Creí que nunca lo vería a él en nadie, pero tu eres idéntica a él, tienes esos ojos oscuros que repudio, tienes esa nariz fina de el, odio que me recuerdes a Damiano Capelleti.
Tomo una bocanada de aire. Abro mis ojos y tardo en enfocar. Mi corazón late tan fuerte que me duele el pecho. Tengo la boca seca, mi mente viaja a mil por hora. Me duelen los oídos, siento que no puedo respirar. Unas manos reconfortantes me toman por los hombros.
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SOLAMENTE MÍA.
RomanceRoke no era su verdadero nombre. Siempre fue especial, diferente, callada y casi nadie la notaba. Su vida pasaba sin pena, guardándose los momentos que la marcaron. Hace tres años había llegado a la mansión Baker, nadie sabía mucho de ella, por es...
