Ocho primaveras sin ti,
Ocho primaveras sin ti es igual a qué nunca hubieras existido, es igual a qué nunca has estado, y es igual a qué yo nunca he existido.
Ibas y venías cuáles mariposas en verano, me hacías sentir amado y después te desvanecías en medio de una tormenta de nieve de un crudo invierno.
Decías que me querías, me rompías como plato al suelo, me reparabas y me volvías a soltar, y los pedazos de mi corazón, aumentaban con cada caída. Y sin embargo, yo seguía ahí, porque aunque yo quisiera arrancarme está parte de ti, una parte de mi se fue contigo, y es igual a que la parte intercambiada, estará conmigo hasta la muerte.
Destruiste la parte más inocente de mí, rompiste mi confianza, y me destruiste las veces que quisiste.
Y al paso del tiempo, ese niño creció, sin emociones, sin saber cómo expresarse o tal vez con miedo a hacerlo.
Me hiciste frío como aquel invierno en el que te desvanecías, vivo en un invierno eterno y que ni el sol más fuerte de un verano podrá derretir.
Una parte de ti se quedó conmigo, pero no puedo quitarmela porque moriría, porque hacerlo, implicaría arrancarme el corazón por completo.
Y al final de esta historia, el diablo nunca cambia dicen por ahí. Espero nunca vuelvas, porque hasta entonces, seré yo el que me pierda entre la nieve para nunca más volver.
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Latidos Del Tiempo
PoesiaLas estaciones cambian con el pasar del tiempo, y yo sigo paralizado en un vacío tanto mental como emocional, en un prólogo de mi vida que no sé cómo iniciar, estoy paralizado en medio de una montaña sin saber que hacer que hacer, solo escuchando el...
