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P.V Ohm

Drake estaba quieto, mirando un punto fijo en la pared con una clara mezcla de emociones en su rostro: parecía debatirse entre levantarse y golpearme o abrazarme a modo de consuelo.  Sentí un nudo en el estómago y un temblor en mis manos al ver su expresión.

—Eres un idiota —dijo finalmente, y yo no pude más que darle la razón—. No te vas a quedar de brazos cruzados viendo cómo tu chico es atacado por algo que no hizo, ¿verdad?

Mis manos se agarraron al borde de mi asiento, sintiendo cómo el nudo en mi estómago se apretaba aún más. Tragué saliva antes de responder.

—No, claro que no... pero no sé qué...

—¿Vas a dejar que eso pase sí o no? ¡Sé claro! —me interrumpió.

—No... —susurré.

—¿Qué dijiste?

—¡Que no, no voy a permitir que sigan atacando a Nanon de esta forma! —dije con más firmeza.

Drake sonrió satisfecho, pero después me miró con pena.

—Esto no va a gustarte mucho, y seguro te vas a ganar muchos golpes en el proceso, pero es necesario.

—¿Qué cosa?

—Debes hablar con los amigos de Nanon.

¿Qué? ¿Con... Jimmy? No, no, definitivamente no. Ese chico me odió desde un principio, ahora debe ser mil veces peor, tal vez hasta podría matarme con sus propias manos de ser posible. El otro parecía ser más amable, sin embargo. Ugh... Iba a pasarla terrible, eso era seguro.

Podía negarme, decir que podía hacer todo por mi cuenta e irme. Drake no podía obligarme a hacer algo que no quería; sin embargo, todas aquellas absurdas excusas se desvanecían por completo cuando recordaba la mirada llena de pánico de Nanon ese día. No podía dejarlo solo. No iba a dejarlo solo.

Miré fijamente la puerta unos segundos, tomándome mi tiempo antes de tocar el timbre

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Miré fijamente la puerta unos segundos, tomándome mi tiempo antes de tocar el timbre. Lo sé, estaba exagerando un poco... O tal vez no, después de todo, mi cara no saldría intacta de acá. Eso era un hecho.

—Tú puedes... Tú puedes... —me animé a mí mismo en voz baja.

Antes de poder reunir el coraje suficiente para tocar la puerta, esta se abrió de golpe, y un impacto repentino me dejó aturdido. Para mi sorpresa, no era Jimmy, sino el otro chico que vi un par de veces, el "pacífico".

Seguido de ese golpe, vinieron más y más, pronto me encontraba tirado en el suelo con el otro chico sobre mi, dándome golpes sin parar. Me dolía como la mierda, pero no me defendí, la verdad es que lo merecía.

—Sea, calma.

Apareció finalmente Jimmy, agarrando al otro chico y apartandolo de mi.

—¿Qué es lo que quieres? Ya arruinaste la vida de Nanon. Lo usaste de una manera asquerosa, lo hiciste quedar como un vil monstruo y borraste las únicas pruebas que tenía para defenderse.

Wrong (OhmNanon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora