27

211 31 15
                                    

P.V Ohm

Jimmy miraba la grabación con el ceño fruncido, por un momento hasta temí que del enojo terminara tirando el celular al piso. Eso no pasó, por suerte. En su lugar murmuró un par de maldiciones mientras me lo devolvía.

Nanon ya estaba bien, fuera de peligro. Por suerte, yo había llegado a tiempo y no quería ni pensar en los "hubiera".

Si hubiera llegado más tarde

Si no hubiera revisado el celular

Si no hubiera...

Nada de eso importaba, porque Nanon estaba bien. Ninguno había podido pasar a verlo porque estaba inconsciente y no era horario de visita. Así que, mientras esperábamos, les mostré a Jimmy y Sea el vídeo que Drake me pasó.

Samanta había sido tan tonta como para confesar todo frente a una cámara. O bueno, al menos lo más importante. Drake lo unió con un vídeo mío pidiendo disculpas y aclarando la situación. Solo era cuestión de tiempo para que Samanta deje de verse como la víctima y se la reconozca como es: una criminal. O bueno, de momento solo una mentirosa. Pero poco a poco todo saldría a la luz.

—¿Cuándo vas a subirlo?

—Drake ya lo hizo.

Y es que sí. Drake no estaba en el hospital con nosotros, porque estaba centrado en la edición del video y luego, en hacerlo viral. Él parecía estar bastante seguro de que Nanon se recuperaría y quería acelerar todo antes de que él saliera del hospital. No sé si realmente lo pensaba así o solo quería darme esperanzas a mí. Pero las cosas sucedieron como él dijo. Solo quedaba esperar que Nanon abra los ojos.

Jimmy asintió, mirando fijamente el piso, como si este pudiera responder todas sus dudas o acabar con todos los problemas de una vez por todas.

Todo quedó en silencio después de eso. Uno que al parecer nadie quería romper, al menos hasta que Sea fijó sus ojos en mí y lejos de ese odio que había visto en ellos desde hace días, parecía estar agradecido.

—Gracias...

—No tienes que...

—¿Señor? —preguntó una enfermera, acercándose a mí —. No esperaba verlo de nuevo tan pronto.

—Amm... Mi... —¿Cómo lo nombraba? ¿Mi pareja, amigo, la persona que ahora me odia? Era complicado, pero me negaba a decir en voz alta que ya no éramos nada—. Mi...

—¿Su esposo tuvo algún accidente? —me interrumpió.

¡Claro! Era ella, ¿cómo no la reconocí antes? Estamos en el mismo hospital. Aunque debo confesar que jamás creí que la encontraría de nuevo. Después de todo, hay varias enfermeras aquí; el hecho de cruzarme con ella era pura suerte.

—Sí, está ahí adentro, pero no es momento de visitas.

—Pero señor... Si es su esposo, entonces tiene derecho de entrar. Deme un momento.

La chica me sonrió una última vez antes de irse.

—¿Esposo? —cuestionó Jimmy.

—Bueno es que... Cuando Nanon tuvo el accidente yo vine a verlo, pero no me di cuenta de la hora, así que ya estaban por correrme de la habitación. Lo único que se me ocurrió fue decir que era mi esposo.

—¿Y te creyeron?

—Claro

—Jesús... —susurró Jimmy con sorpresa, como si no pudiera creer que nadie haya verificado si mis palabras eran de verdad o no —. Y es esa misma enfermera, ¿no? ¿Cómo es que tienes tanta suerte?

—Bueno... —lo pensé unos segundos, ¿qué se supone que diga? —Hay alguien allá arriba —Señalé el techo —. Esa persona me quiere mucho, al igual que a Nanon y quiere que nosotros dos estemos juntos. Así que va acomodando las cosas para que nosotros dos podamos avanzar en nuestra relación. Soy como el protagonista de una historia —aseguré con decisión y luego agregué: —tú eres uno de los secundarios.

—¿Estás bromeando? —Jimmy frunció el ceño y negó con la cabeza —. Todo esto que pasamos te afectó bastante.

Vamos, solo fue una idea. Ni yo podía explicar por qué eso había pasado. Solo suerte y ya, supongo. Sea lo que sea, estaba agradecido con eso. No se me ocurrió sacar la carta de "soy el marido".

La enfermera no volvió de inmediato como pensaba, sino que tardó unos minutos hasta que finalmente regresó y me aseguró que ya podía entrar a ver a Nanon.

Mis manos sudaban en el momento que abrí la puerta y entré. Sentí una presión en el pecho cuando vi a Nanon en aquella camilla, otra vez. Es que de verdad él no merecía estar aquí. Él debería estar en su casa, viendo alguna serie o incluso trabajando. No en un hospital.

Me acerqué a la camilla, agarrando su mano.

—Tenía tanto miedo de perderte —susurré. Él no podía oírme, pero tanto silencio ya era doloroso —. No vuelvas a hacer eso. No sé qué haría sin ti.

Su apariencia se veía tan tranquila. Tan relajada. Como si solo estuviera durmiendo luego de un largo día de trabajo.

—Estoy bien incluso si me odias. Solo no desaparezcas.

Dejé un corto beso en sus labios, seguido de otro, otro y otro. No estoy seguro de cuántas veces lo besé, pero al momento de alejarme, fue cuando noté que sus ojos, anteriormente cerrados, estaban centrados en mí.

—¿Nanon?

Nanon parpadeó un par de veces, confundido. Miró la habitación y luego a mí otra vez. Sus ojos estaban medio desenfocados.

—¿Qué...?

—Nanon... Estás despierto, yo...

—Vete —soltó de repente.

Sus palabras fueron como un puñal en el pecho, pero lo que más me dolió fueron sus ojos. Ya no estaban desenfocados como antes. No lucía perdido, parecía haber analizado la situación bastante rápido; en lugar de eso, era como una ventana cerrada. Ya no demostraba ninguna emoción.

—Nanon...

—¿Por qué estás aquí? —Alejó mi mano, como si el tacto le desagradara —. Deberían estar Jimmy o Sea. No tú. Cualquiera menos tú.

—De verdad lo siento, Nanon...

—Solo vete. Te odio muchísimo, Ohm Pawat, no quiero volver a ver tu desagradable rostro cerca. Ni una sola vez.

Asentí, sin ser capaz de decir algo más. Me lo merecía. Merecía todo ese desprecio. Pero incluso así, todavía dolía muchísimo.

Me negué a soltar siquiera una lágrima mientras veía a Nanon una última vez.

Me negué a soltar siquiera una lágrima mientras veía a Nanon una última vez

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sé que lo de la enfermera parece sacado de la manga prácticamente. Y bueno, sí... Pero si lo piensan bien, es el mismo hospital, tan fuera de lugar no queda...

Unaescritoradesesperadabuscandojustificarse

Era necesario para la trama. Fin.

Y bueno, ¿qué opinan del capítulo? ¿Les gusto? ¿No les gusto? Confieso que no es de mis mejores capítulos, pero no se alarmen, el drama todavía no acaba.

Wrong (OhmNanon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora